2 Desaladoras y 2 Tratadoras de Aguas Residuales Aliviarían Problemas de Abasto del Vital Líquido y Aguas Negras
*Es impostergable la inversión en tecnología para resolver el problema de la crisis hídrica y la contaminación de los vasos de captación
Francisco Herrera
Debido a que el cambio climático ya alcanzó a la zona sur, aunado a la falta de interés de los gobiernos pasados y actuales por invertir en infraestructura hídrica, la población, industria y el campo necesitan contar, a corto y mediano plazo, con plantas tratadoras de aguas residuales y desaladoras que permitan tener la suficiente agua para el uso cotidiano, y no depender completamente de las lluvias.
Al respecto, el ex Presidente del Consejo Ciudadano del Agua del Estuario del Río Pánuco(Cocaerp) José Luis León Hurtado, expresó que la región necesita concluir con el 100% del tratamiento de sus aguas residuales, pues entre las tres ciudades generan 3 mil 100 litros por segundo.
Explicó que de esa cantidad solo se trata el 50%, es decir que poco más de 1500 litros por segundo se tiran al sistema lagunario, así como otros vasos de captación, qué bien podría usar la Industria y dejar de tomar agua del sistema lagunario
Dijo, que por lo menos se necesita construir una planta tratadora de aguas residuales en Altamira, que ayude a abatir las descargas de aguas negras a la Laguna del Champayán, y una segunda planta en las cercanías de la Laguna del Carpintero, donde hay detectadas 26 descargas sanitarias.
«Con esas dos plantas se tendría el 100% de las aguas tratadas en la zona, y esa agua bien la podría utilizar la industria para todas sus actividades», expuso
León, abundó que para garantizar el abasto del vital líquido la región necesita contar con una planta desalinizadora en Altamira, y otra más en la Refinería de Ciudad Madero.
«Con esas dos plantas desaladoras ayudarían en mucho a contar con agua para la población. Ese es el camino a corto y mediano plazo que nos ayudará a seguir preservando el vital líquido».
El ambientalista de la región, puntualizó que los tiempos cambiaron y el futuro llegó a esta parte de la entidad con el cambio climático.
«Hoy es una realidad el cambio climático, ya está entre nosotros y es urgente que se invierta en tecnología para poder garantizar el abasto de agua a la población, industria y el campo», acotó