Américo Villarreal carece de un Secretario General de Gobierno con capacidad de negociación y operación efectiva.
La problemática magisterial y de gobernanza por la falta de atención en diversos sectores, está mermando mucho al estado de Tamaulipas, y esto, es en gran parte por la falta de negociación que tiene el Secretario General de Gobierno, que se muestra carente de argumentos y carácter para poder establecer un manejo poltiico estable en el gobierno del estado.
Lo anterior deja ver que aunque el gobernador el Dr. Américo Villarreal Anya, presente voluntad y apertura para la resolución de los asuntos que tiene el estado y realice los esfuerzos para contar con diálogos que permitan establecer acuerdos en beneficio de la gobernabilidad que requiere el estado, necesita imprescindiblemente del apoyo de su equipo de trabajo más cercano.
Con esta problemática, quien lleva el tema de política interna en el estado y que directamente tendría que estar atendiendo y dando soluciones al gobernador tiene que ser Héctor Villegas Gonzáles “el Calabazo”, que a casi un año de gobierno sólo ha dado muestras de inexperiencia y que el poner la solución de lo que aqueja al estado en manos de autoridades en la Ciudad de México, solo expone el mal manejo de crisis que tiene el “Calabazo” en la administración Americanista, lo que da por resultado un efecto negativo para el gobernador, algo que los detractores al gobierno aprovechan para linchar mediáticamente al gobierno y al primer círculo del gobernador.
Sin duda alguna el grupo de Secretarios impuestos por González Robledo, producto de la cuota del Maderense, están haciendo mal las cosas y siendo muy tibios a la hora de ejercer sus responsabilidades entre ellos “el calabazo”; caso contrario, los secretarios puestos por directamente por el gobernador están buscando las formas para ayudar y tender los puentes necesarios que se ocupan en el gobierno estatal. Eso si, ya se dice entre secretarios que el calabazo está muy endeble y con el caso de Lucía Aimé Castillo Pastor, también se menciona en “petite comité” que una salida decorosa por el voto de confianza que le hizo el doctor, sería hacerse a un lado y dejar que se proponga a una mejor opción que permita el diálogo y rinda cuentas al gobernador y este perfil lo reúne el amigo de los hijos Hugo Fonseca.
Si me lo cuentas con Santo y Seña, lo publicamos.