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AMLO: no habrá impunidad

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Oscar Contreras

AMLO: no habrá impunidad

Al presidente Andrés Manuel López Obrador no le gusto la decisión que tomó la Suprema Corte de Justicia de la Nación al devolverle el fuero al gobernador Francisco García Cabeza de Vaca, porque al hacerlo le quita a la Cámara de Diputados (que AMLO controla) la posibilidad de amenazar a los gobernadores desde el poder legislativo.

Una prueba de ello es que el Congreso de Campeche acaba de solicitar el desafuero de “Alito” a la Cámara de Diputados para que sea aprendido y juzgado en esa entidad, casi por lo mismo que a García Cabeza de Vaca, pero ahora la petición del desafuero surgió desde lo local, para no cometer el mismo error que con el gobernador de Tamaulipas.

Lo cual nos lleva a pensar que a López Obrador le molestó la decisión de la Suprema Corte y de eso no hay la menor duda porque hasta expresó:

“Es una controversia y hasta su nombre lo indica, controversia entre poderes y en este caso la autoridad competente es la Suprema Corte de Justicia que resuelve no dándole la razón al Poder Legislativo, solo en el caso, eso también hay que aclararlo, de la orden de aprehensión por corresponder al Poder Legislativo local el procedimiento, eso no significa impunidad”.

Y para no verse tan antidemocrático por no decir que como un tirano dijo:

“Es una decisión del Poder Judicial, hay cosas que a mí no me parecen como seguramente a muchos otros, pero tenemos que respetar la decisión del Poder Judicial, hay que respetarla”.

Por supuesto que AMLO puso énfasis en que no habrá impunidad en un abierto interés porque García Cabeza de Vaca sea aprendido para ser juzgado y la maniobra que inició desde el año pasado en la Unidad de Investigación Financiera, no se vea como una vil venganza preparada desde Palacio Nacional.

Ahora se comprende por qué envió a Santiago Nieto a Tamaulipas como asesor del doctor Américo Villarreal para la entrega-recepción, la cual iniciará en 11 días y por supuesto que AMLO buscará a como dé lugar, poner en la cárcel al gobernador tamaulipeco después de que fracasó al tratar de hacerlo desde la Cámara de Diputados utilizando a la Unidad de Inteligencia Financiera lo cual no le funcionó.

De tal manera que cuando García Cabeza de Vaca termine su sexenio, el mismo día y en el primer segundo, no dudamos que AMLO envíe a las fuerzas federales de seguridad que tiene el Estado mexicano, para que lo aprendan, porque ahora sabe que dejarlo libre pudiera desbaratarle su proyecto rumbo al 24 y por eso mismo señaló:

“Lo vimos en Tamaulipas, en las elecciones pasadas… en un ambiente difícil de acoso, de miedo, de promoción de violencia, la gente salió a votar, porque cuando la gente no participa es cuando se les facilita el fraude, cuando la gente participa, aunque compren votos, aunque amenacen, no les alcanza, esto se tiene que tener muy presente porque la democracia obviamente no es el INE, ni es el Tribunal Electoral, la democracia es el poder del pueblo”.

Y claro, para el presidente Andrés Manuel López Obrador “la democracia es el poder del pueblo” y especialmente ese “pueblo” que tiene en Tamaulipas favorecido con los más de 600 mil beneficiarios que el gobierno federal mantiene a través de los apoyos que les regala y con los cuales ganó Américo Villarreal Anaya, es importante señalar y ponemos énfasis, para que no se confunda:

El doctor no tiene nada que ver en esta venganza de AMLO contra García Cabeza de Vaca, por supuesto que el presidente eligió a Villarreal Anaya porque sabía que era el único que podía triunfar en el estado, especialmente por la honestidad con que actúo su padre cuando fue gobernador de Tamaulipas y para agradecerle el apoyo que le dio cuando él iniciaba en la política como dirigente de un grupo de pescadores tabasqueños.

Por ello, ahora sí no perderá la oportunidad de vengarse de lo que le hizo García Cabeza de Vaca con la Alianza Federalista, de la cual fue su fundador y poco faltó para que la insurrección de un grupo de gobernadores creciera por todo el país y eso, obligó a López Obrador a negociar con cada uno de los mandatarios estatales.

Eso AMLO no quería hacer, desde que llegó a la presidencia de la República, porque al dialogar con los gobernadores mostraría su debilidad, es intolerante, no le gusta ceder y mucho menos negociar con los recursos federales que piensa que son de su propiedad y a eso, es lo que el gobernador de Tamaulipas lo obligó a hacer.

Sin embargo, en la ceguera que le da el poder presidencial casi absoluto, a López Obrador se le olvidó que hay una división de poderes y que en cada estado se manejan de manera soberana, y ante eso, nada pudo hacer, porque ahí los equilibrios se dan y es muy difícil que el presidente de la República baje para tener el control si no le gusta negociar.

Por esto y de manera contundente Santiago Nieto declaró: “No se exonera a Cabeza de Vaca, sino que mantiene la inmunidad constitucional y esa se termina el último día de septiembre. Al no tener fuero, autoridades locales y federales podrán proceder en su contra y solicitar las órdenes de aprehensión por los delitos que le fueron imputados”.

Finalmente, todo indica que el presidente Andrés Manuel López Obrador tendrá al fin, la manera de cobrarse la afrenta que le jugó el gobernador Francisco García Cabeza de Vaca, al formar la Alianza Federalista y la cual le podrá seguir dando la fuerza y el impulso necesario para aspirar a la candidatura a la presidencia de la República, aunque antes tiene que salir bien librado de la amenaza de AMLO cuando casi le mando decir que “no habrá impunidad”.