ARMANDO MARTÍNEZ, EN ALTAMIRA FIRME A LA REELECCIÓN.
T E C L A Z O S
Por Guadalupe E. González
ARMANDO MARTÍNEZ, EN ALTAMIRA FIRME A LA REELECCIÓN.
X.-Juvenal Hernández Llanos, “tiró la toalla, antes de subirse al ring”.
X.- “Temió sufrir la tercera derrota consecutiva frente al presidente Mpal”.
REZA el adagio que “el tiempo no pasa en balde” y “los ciclos se cumplen” y hoy, estos preceptos dan cuenta de, “aquel político que se ufanaba” ser el todo poderoso en la grilla Altamirense, pero ahora, en su intento por buscar una vez más la alcaldía de ese puerto industrial y “verse totalmente endeble”, porque ya no cuenta con las herramientas, ni con los mecanismos indispensables para entrarle a una contienda electoral como la que hoy tenemos en puerta, penosamente Juvenal Hernández Llanos, no tuvo más alternativa que, “tirar la toalla antes de subirse al ring”, para enfrentarse al bien posicionado alcalde Armando Martínez Manrique.
PORQUE, entre otras cosas, el ex alcalde del PAN Juvenal Hernández, al verse descobijado y carente del peso político que tuvo en el pasado, estratégicamente dejó las desmoronadas filas albiazules, para “mezclarse en el escenario político Morenista” y, enseguida registrarse como aspirante a presidente municipal por Morena, sin ser de ese partido, pensando en reivindicarse, pero (al verse y sentirse rechazado por el pueblo), obró finalmente, por “quitarse los guantes” y retirarse de la contienda, porque “temió ser objeto de la tercera derrota consecutiva”.
RECUÉRDESE que, fue precisamente el alcalde Armando Martínez Manrique, quien, en el 2021, (en la primera derrota asestada a Juvenal), le dio una tremenda vapuleada electoral a su entonces candidato del PAN a presidente Municipal Ciro Hernández Arteaga, por cuyo descalabro político, “Hernández llanos, se vio ya sin el poder político que tenía bajo su control y dominio en aquel municipio”.
Y EN LA segunda derrota sufrida por Juvenal en el 2022, éste desvalijado político, al andar apoyando al Truco César Verástegui Ostos, como candidato a Gobernador por la coalición PAN, PRI, PRD, al final de la contienda el, presidente municipal (Armando Martínez Manrique, salió avante con el apoyo de su pueblo), haciendo ganar en Altamira, por muy amplio margen al actual Gobernador de Tamaulipas Dr. Américo Villarreal Anaya, cuyo detalle confirma la solidez política de la que, evidentemente goza en el territorio Altamirense el actual jefe de la comuna de quien diremos “VA FIRME y sin baranda” y, sin obstáculos” HACIA LA REELECCIÓN, porque, contra lo que se diga, “Armando, tiene al pueblo de su lado”. Porque en el Gobierno Municipal de Altamira se trabaja a cabalidad, para cumplir con los ideales y los retos trazados por “la Cuarta Transformación”.
Y POR sus propios errores políticos, se vislumbra que, el otrora poderoso hombre de Altamira Juvenal Hernández, ahora políticamente, anda desencajado “como minino”, sin saber qué hacer, porque, toda la gente a la que, les hizo miles de promesas cuando estuvo en el poder político municipal, junto a su respetable esposa y no les cumplió, esa gente decepcionada, prefirió retirárseles porque fueron objeto del engaño y la traición de parte de Juvenal, de quien diremos que, “si este, desea recuperar el terreno perdido”, ese objetivo político, “difícilmente lo podrá lograr”.
PUES no olvidemos que, a las gentes que no se les cumplen sus promesas, estas le pierden la fe y confianza a quien o quienes las engañan y, eso precisamente, fue lo que grotescamente Hernández Llanos hizo en perjuicio del pueblo Altamirense, abusando del poder político que lo tenía encumbrado, sin darse cuenta Juvenal que, “los ciclos se cumplen” y las (falacias-mentiras) también afectan y ahora, este político panista, anda afanosamente en busca de cobijo político y, si en el PAN ya no tenía nada que hacer, en Morena menos lo recibirán, porque recuérdese que, “el que traiciona una vez, traiciona dos y más veces” y Juvenal, es uno de esos políticos irresponsables que, “solo velan por el interés propio y no por el inertes colectivo”, sus hechos así lo dibujan.
FINALMENTE, lo peor para el ex hombre fuerte de Altamira Juvenal Hernández Llanos es que, “le empiecen a rascar” en la Auditoría Superior del Estado a las cuentas públicas de la ex alcaldesa Alma Laura Amparan, cuyo detalle no se descarta, porque deberán aclararse cada una de las obras de infraestructura que se hicieron durante el referido gobierno Municipal, de la ex edil de ese puerto industrial, por la versión de que, “muchas de las obras dadas como ejecutadas y terminadas”, una gran parte de estas, quedaron inconclusas y eso, naturalmente, llevará a la ASE, a instrumentar una meticulosa revisión de los manejos administrativos de ese herido gubernamental.
Por hoy es todo y hasta mañana.
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