Causa perdida de Lydia
Opinión pública
Causa perdida de Lydia
Por Felipe Martínez Chávez
Cd. Victoria, Tamaulipas. – Quién sabe a qué le tira Lydia Madero García, ex secretaria de Salud en Tamaulipas, al embarcarse en el proyecto de Adriana Dávila por la dirigencia nacional del PAN.
Si alguien sabe que van a perder, es ella. Conoció los nauseabundos sótanos de la derecha en los tiempos de Calderón y su amiga Margarita Zavala, que le dieron remunerativas chambas.
El fin de semana acompañó a Dávila en su gira por Tamaulipas, donde el propietario y cacique de las siglas es Francisco Javier, el ex Gobernador que la nombró (por recomendaciones) y la corrió del gobierno.
Traen causa perdida. Los cabecistas -posesionados del CDE- ni las recibieron ni facilitaron reuniones entre los poco más de ocho mil militantes celestes que siguen fieles al ex Gobernador.
Lydia fue nombrada jefa de Salud el uno de octubre del 2016. Renunció el siete de abril de 2023 al no comulgar con los métodos gandallas del cabecismo.
Vienen a gritar al desierto cuando piden acabar los cacicazgos de Acción Nacional y el “oficialismo” interno, y llaman a votar en la elección del diez de noviembre.
Cierto, ella, junto con Leonor Sarre, refundaron al partido en Victoria, pero luego se apropiaron de los cargos de elección regalados: Diputada local, diputada federal, senadora, hasta que regresó a su tierra Nuevo León.
De las mujeres azules es la campeona de representación proporcional. No ha ganado una por mayoría
Le tocó recibir el primer subsidio oficial, (entonces IFE) que no quería agarrar para no ser parte de la corrupción del PRI, decía. Con el recurso compró el edificio del partido en 16 Rosales.
Con el matrimonio Calderón dirigió el entonces Instituto Nacional de Solidaridad. Luego se fue a vivir a Europa con la chambita de una oficina de México en Estrasburgo, Francia, hasta que se acabó el sexenio hoy fuertemente criticado por no “enterarse” que García Luna, su jefe de Seguridad Pública, tenía ligas y trabajaba para el narco.
La regia Madero conoce bien Tamaulipas y en especial Victoria, donde fue dos veces candidata a la presidencia y estuvo a punto de lograrlo, en el segundo intento, con el apoyo de los adinerados neoleoneses. No pudo escribir la otra historia que pregonaba.
En 1998 le ganó la penetrante campaña de “el ingeniero va a ganar”, cuando ella tenía repartido el gabinete de colaboradores.
Sabe de los cacicazgos internos y cómo se las gasta Cabeza y compañía, que siguen siendo los dueños del CDE y consejo estatal. Está enterada que son capaces de arrebatar si pierden.
El compromiso más fuerte que traen para los azules cuerudos, es finalizar la alianza con el PRI porque “los combatimos tanto tiempo y ahora vamos juntos”. Esa relación ya terminó. Fue un amorío de seis años.
Si como dicen, del odio al amor hay un paso, también lo es a la inversa. Sabían que venían a pisar territorio minado. A los 74 años se le cerró el mundo a Doña Lydia.
Critican que los panistas “empezaron a actuar de manera similar al actuar del PRI” ¿quién fue la perdición de quién? ¿quién cometió violencia doméstica? El divorcio fue necesario.
La factibilidad es acabar con los “recostones” y crear un solo partido PAN-PRI para ver si pueden con Morena.
Recorrieron para nada las principales ciudades de Tamaulipas, sabiendo que el 10 de noviembre las urnas estarán en manos de los cabecistas para favorecer a Jorge Romero. Los métodos de “convencimiento” serán los mismos: Por las buenas o las malas.
En el Consejo Nacional igual están perdidas: El propio Francisco Javier es consejero, junto con sus amigos Gerardo Peña, Francisco Garza de Coss e Imelda Sanmiguel.
Si vinieron a turistear, escogieron mal tiempo. La lluvia las agarró por acá.
Tema aparte destacar que, según la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana, publicada por el INEGI este lunes, en el tercer trimestre del año la zona sur de Tamaulipas, Tampico, Madero y Altamira son la tercera zona más segura de México.
La percepción de seguridad es del 80 por ciento, lo contrario de 2016 cuando el mismo de ciudadanos se sentían inseguros.
El resultado marca un máximo histórico desde que el Instituto comenzó a realizar la encuesta. Coloca a la zona conurbada solo después de San Pedro Garza García, en Nuevo León, y alcaldía Benito Juárez en la Cdmx.
En los últimos tres meses las opiniones favorables se incrementaron de 78.5 a 80.0 por ciento, lo que traducido a números representa alrededor de 16 mil ciudadanos. Buena para el secretario de Seguridad, Chávez García, y el Gobernador Américo Villarreal, que todos los días se ocupan del tema.
En la UAT, el Rector Dámaso Anaya testificó el cumplimiento del contrato colectivo al entregar los vehículos sorteados en junio pasado entre docentes del SUTAUAT. Los ganadores fueron Nelly Adriana Ayala López, de la facultad de Derecho de Tampico; Sergio Rafael Hernández de Comercio y Administración Victoria, y Miguel Ibarra Sánchez de la Unidad académica de Río Bravo. Ganaron auto VW Polo Track.