El Congreso se desintegra
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Por Oscar Contreras
El Congreso se desintegra
La descomposición de las mayorías del poder legislativo en Tamaulipas, es consecuencia de una equivocada selección de candidatos que los partidos del PAN y MORENA hicieron en la pasada elección y hasta parece que los sacaron de un concurso de gritos, de pleitos callejeros o de hacerse las víctimas y eso, al Pueblo tamaulipeco, lo tiene harto por su falta de sensibilidad social y oficio político.
La ciudadanía ya se dio cuenta que los diputados del PAN y MORENA, salvo uno o dos casos, no tienen vocación para estar en el Congreso, no cuentan con la cultura política necesaria para entender, lo que hacen ahí y lo único que le demuestran a la sociedad, a los ciudadanos y al Pueblo de Tamaulipas, es que nunca más votaran por ninguno de ellos para ningún cargo de elección popular.
Y es que no son conflictivos, no, son más que eso y lo han demostrado en los hechos y en todo el tiempo que lleva la 65 legislatura local, pero lo peor es que aún les falta un poco más de un año y ya no se espera que cambien, porque lo único que buscan es apoderarse del Congreso para satisfacer su venganza y su ambición personal.
Lo que no pueden hacer los morenistas y panistas con la razón y un buen oficio legislativo, lo hacen con gritos, manotazos y con la creación de reglamentos internos y figuras administrativas como la Junta de Gobierno que sólo benefician su revanchismo, sus apetitos por establecer el poder absoluto y la creación de más burocracia legislativa que no sirve de nada más que para despertar los apetitos de la corrupción.
Es por eso que estas dos bancadas legislativas lo único que evidencian es mantener bajo su control y dominio los cargos administrativos y de finanzas, lo cual demerita el trabajo que deben realizar los diputados, que es el estudio, análisis y la reflexión sobre las leyes que deben cambiar o nuevas a proponer.
Por ello, sí los diputados de la bancada de MORENA y del PAN tuvieran una agenda legislativa y un programa de trabajo con el objetivo de mejorar las leyes, reglamentos y códigos de Tamaulipas, valdría la pena esta lucha que tienen por controlar el Congreso del estado y el Palacio Legislativo, pero no es así.
Y como se puede observar, los diputados de MORENA lo único que buscan al mantener el manejo administrativo del Congreso, son los privilegios como el ganar los casi 100 mil pesos al mes que obtienen por ir a gritar al Palacio Legislativo, más los gastos que realizan siendo legisladores, uno que otro beneficio que les otorgan los que manejan las finanzas del Poder Legislativo y los recursos del Congreso estatal.
En conclusión, la lucha de la bancada del PAN y MORENA no es más que la lucha por el manejo de los recursos, del dinero, y la Auditoría Superior del estado de llevar a cabo una exhaustiva revisión de los gastos que han realizado, así como una compulsa de las facturas que entregan las bancadas del PAN y MORENA, porque ahí es donde pudiera estar uno de los mayores desfalcos de la historia del Congreso estatal.
Ojalá que en la próxima elección del 2024 los partidos políticos sepan elegir a sus candidatos a la diputación, el Pueblo de Tamaulipas y los electores se los van a agradecer, porque lo único que quieren es que ya no elijan a gente sin preparación, cultura política y que no sepan a lo que van al Congreso de Tamaulipas.
De salida. Los estados como Nuevo León, Veracruz y San Luis Potosí con los que Américo Villarreal pactó un acuerdo de seguridad, son de los diez más violentos de México y a los gobernadores como Ricardo Gallardo Cardona y Cuitláhuac García, se les han vinculado con diferentes grupos del crimen organizado, de violentar los derechos humanos y permitir la impunidad de las autoridades.
Este acuerdo pudiera ser un pase automático para que eso mismos grupos que están en esas entidades vengan y se asienten en Tamaulipas por lo que se espera que Américo este consciente y sepa muy bien lo que hizo. Si aumenta la violencia en sus distintas modalidades en el estado, sabremos que él es el culpable, porque hasta lo hizo un pacto.
Claro que deseamos que se logre la seguridad, paz y tranquilidad, pero conociendo lo que sucede esas entidades, sólo a un ingenuo o alguien que desconocer lo que sucede en Veracruz y San Luis Potosí, puede hacer un pacto de seguridad.