IMSS MANTE, RIESGO DE CONTAGIOS
POSDATA
GASTÓN ESPINOSA GLZ.
IMSS MANTE, RIESGO DE CONTAGIOS
Están desprotegidas.
Ni su sindicato y menos su patrón, las cuida.
Por eso, salieron a gritar que no tienen el equipo necesario para protegerse ante la contingencia que representa el Covid-19.
Narra una de ellas que, hace unos días, una enfermera del turno vespertino, recibió a un paciente con los síntomas claros del Coronavirus a tal grado que la Secretaría de Salud en Tamaulipas tomó conocimiento del caso y realizó las pruebas correspondientes. Afortunadamente el caso resultó negativo.
“Estamos desprotegidas por nuestro sindicato y por la parte patronal, que en este caso es el Instituto Mexicano del Seguro Social, al no proporcionarnos el equipo de protección personal (cubrebocas, guantes, gel y batas, lentes) por lo que estamos indefensas ante cualquier paciente asintomático del Covid-19, con lo cual, nos arriesgamos nosotras, arriesgamos a los pacientes y a nuestras familias”, señala una de ellas.
No quieren que el Seguro Social de El Mante sea un foco de infección como ocurre en otros hospitales como en la clínica 72 de Tlanepantla, Estado de México, o en el Hospital del IMSS de Monclova, Coahuila, en donde reportan contagios masivos.
“Lo que ocurre en esos hospitales es precisamente porque nuestros compañeros no tienen el equipo adecuado para atender a pacientes con este padecimiento, por lo cual quedamos expuestos a contagios”, sostiene en su declaración, mientras alza una de sus pancartas, con la leyenda: “personal de enfermería no tenemos material de protección”.
Aquí, el Director de la clínica 03 del IMSS Mante, Luis Adrián Vera, ya tiene conocimiento del estado de indefensión en el que se encuentra el personal de enfermería, sobre todo el que tiene el turno de noche, pero poco o nada ha hecho por resolverles su demanda. El Sindicato de Trabajadores del Seguro Social en Tamaulipas, que dirige Pedro Luis Ramírez, de igual manera, sigue abandonando a su suerte a las enfermeras y doctores. Con estas muestras de total indiferencia, se originó que el grupo de valientes enfermeras salieran a las afueras del instituto para revelar a los medios de comunicación que temen por sus vidas al estar expuestas.
Por si fuera poco, tienen que luchar contra la discriminación e ignorancia por parte de la ciudadanía que los ve con recelo, les gritan cosas y las rechazan en los carros de ruta, por el supuesto temor a contagiarse.
Hoy, en el ombligo de la pandemia, las enfermeras están pasando por un trago muy amargo, al no contar con el apoyo de su sindicato y el patrón, al parecer poco les importa su salud. Las están dejando endebles, expuestas a contagios, y parece que su situación no mejorará.
El llamado está hecho.
Un abrazo solidario a ellas, valientes, decididas…y un abrazo por igual, a quienes por miedo a represalias no tuvieron valor para salir a manifestarse, aunque por dentro tengan el mismo miedo que sus compañeras.
EL PEOR ALCALDE DE TAMAULIPAS
Tiene esa designación.
Se la gana a pulso.
Y es que, Paco López Reyes, no ha movido un solo dedo por su gente.
Al único que le va bien, es a él y a su familia.
Las comunidades rurales siguen sin agua y el presidente municipal de Gómez Farías, no es para enviar pipas con el vital líquido para amortiguar un poco la carencia. Tampoco se le ha visto en las campañas de salud que ha emprendido el gobierno de Tamaulipas a fin de evitar el contagio del Covid-19.
Paco sigue escondido. Tiene miedo que la gente le pida agua, o algo peor para él…dinero, porque cuando le tocan ese tema, siente que le arrebatan una parte de su ser.
Paco ya no da para más.
Ya su nombre se desgastó, ya su imagen se hizo trizas ante una sociedad que está deseosa de una nueva cara, de nuevas ideas y sobre todo, de nuevas acciones.
No exagera la gente cuando dicen que su alcalde, es el peor presidente municipal de Tamaulipas.