La ganadería está en peligro
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Por Oscar Contreras
La ganadería está en peligro
Desde hace un año el gobierno federal sabía de la presencia del gusano barrenador en Centroamérica y nunca hizo absolutamente nada para evitar que llegara a México y pusiera en peligro el comercio de ganado que se tiene con los Estados Unidos.
Los ganaderos le pidieron infinidad de ocasiones que realizará los protocolos necesarios de prevención y seguridad, pero las autoridades nunca les hicieron caso y ante la indiferencia mostrada, la semana pasada el jueves 21 de noviembre en Catazajá, Chiapas fue detectada una larva de este maligno bicho.
Se asegura que desde hace un mes y medio debió cerrarse la frontera de México con Centroamérica, pero prevaleció el sentido humanitario y solidario del gobierno de la 4T y eso mismo provocó que el contrabando de ganado continuara y muchos de los animales que pasan no cuentan con la supervisión del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA).
Es importante comentar que, en México, desde la década de los años setenta se trabajó en lograr su erradicación. En 1991 se declaró oficialmente libre de esta enfermedad, pero fue hasta 2019 que se hizo la auto-declaración como país libre de miasis por C. hominivorax y miasis por C. bezziana a nivel internacional.
Sin embargo, el anuncio sobre su presencia en Chiapas puso en alerta a las autoridades norteamericanas y de inmediato cerraron su frontera de manera temporal al ganado mexicano y evitar que llegue a su territorio la larva cochliomya hominivorax (gusano barrenador).
Esta situación provocará que los lotes de ganado que se tenían preparados para vender se detengan con lo que se afecta al sector ganadero del país, a la economía y a miles de familias que viven del cuidado y engorda de ganado.
Cabe señalar que en el presupuesto federal 2025 presentado por el gobierno de Claudia Sheinbaum al Congreso de la Unión el sector agrícola es uno de los afectados, pasó de 90 mil 367.33 MMDP en el
2024 a 51 mil 513 MDP en 2025 por las medidas de austeridad establecidas para terminar, dar mantenimiento y promover los proyectos del expresidente Andrés Manuel López Obrador.
Lo peor del caso es que mientras no se apruebe el presupuesto federal en el Congreso, el gobierno de la 4T no tiene dinero para atacar una medida sanitaria de estas proporciones y mucho menos para cuidar la frontera y se evite la llegada de ganado de contrabando que viene de Centroamérica a México.
Finalmente, todo parece indicar que los gobiernos de los estados productores de ganado para la exportación como Tamaulipas y la Confederación Nacional de Ganadera están buscando posibles soluciones para que el ganado que estaba listo para su exportación a los EU no se detenga.
Esperamos que lo consigan, porque se pierde tiempo, dinero y esfuerzo de uno de los sectores más productivos del país tan solo por el descuido y la falta de atención de las autoridades federales a un tema que conocían y podría provocar lo que hoy se vive en México.
De salida. El PRI de Tamaulipas estará renovando a su Comité Directivo Estatal este día lunes 25 de noviembre y todo indica que habrá un cambio de generación en sus filas con el arribo a la dirigencia de Bruno Díaz quien será el presidente y de Juliana Garza a la secretaria general.
En el camino quedaron Carlos Morris sobrino de Egidio Torre Cantú, así como la ex diputada Copitzi Yesenia Hernández García. De igual manera, Luis Enrique Arreola se queda con las ganas, aunque sigue diciendo que su amigo Alito se la había prometido.
Esto mismo ya no pasa con la regidora maderense Mayra Ojeda Rodríguez quien se había puesto rebelde, pero sabía que de mantener su postura le hubiera costado mucho más.
El caso es que la dirigencia del PRI en Tamaulipas sigue despertando interés en algunos y muy contados priistas como el jubilado petrolero y ex diputado, Gustavo González Balderas, quien buscó ser el dirigente estatal, pero cuando le dijeron en el PRI Nacional que se busca integrar a los millennials (1981 y 1996) a las dirigencias, mejor se hizo a un lado porque él es de los ‘Baby boomers’ (1946-1964) y al parecer esos están pasando a otro nivel de participación.