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Piden endurecer penas por delitos de abuso sexual contra menores en Tamaulipas

Por: Salvador Leal

Ante el pleno del Congreso de Tamaulipas se presentó una iniciativa de reforma al Código Penal del Estado, con el objetivo de duplicar la pena en los delitos de abuso sexual, estupro y violación, cuando fueren cometidos por profesionistas que se desempeñen en atención o servicio de niñas, niños y adolescentes.

Consuelo Nayeli Lara Monroy, legisladora de Morena, indica que estos delitos se han incrementado, por lo que es necesario castigar el abuso sexual con prisión de 12 a 26 años, el estupro de seis a 14 años, en tanto, la violación de 20 a 36 años de prisión.

Además, se deberán de implementar mecanismos para la atención, canalización y seguimiento de los casos que constituyan violaciones al derecho a la educación de niñas, niños y adolescentes, el Estado y los municipios conformen una instancia multidisciplinaria responsable, aseveró.

De acuerdo con el Colectivo contra el Maltrato y Abuso Sexual Infantil, esta cifra es poco realista porque sólo es denunciado uno de cada 100 casos.

En el contexto estatal, y de acuerdo con la estadística de la Incidencia Delictiva del Fuero Común, publicado por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, en Tamaulipas, se registraron de enero a diciembre del año pasado 863 casos de abuso sexual y 592  de violación.

Lo anterior, subrayó, es alarmante, pues tal parece que existe un bajo índice de denuncias presentadas derivado de la desconfianza en las instancias encargadas de resolver el conflicto, ya sean administrativas o jurisdiccionales.

Con base en la vulnerabilidad a la cual están expuestos niños, niñas y adolescentes es necesario cambiar las penas, sobre todo en aquellos profesionistas que desde su estructura jerárquica abusan de esta posición para cometer abuso sexual, utilizando el tiempo o la relación que comparten con los menores.

Finalmente, resulta imperante reflexionar el hecho que la violencia sexual, de acuerdo con datos de UNICEF, se ubica en alrededor de 120 millones de niñas menores de 20 años en todo el mundo; y alrededor de 1 de cada 10 han experimentado relaciones sexuales por la fuerza u otros actos sexuales forzados.