Candidaturas independientes en declive
Gaceta.
Por: Raúl Terrazas Barraza
Candidaturas independientes en declive
La primera elección con candidaturas independientes se llevó a cabo en el 2015, fue una demanda satisfecha tras decenas y decenas de años de lucha para que se reconociera además de los registros a través de partidos políticos a quienes se creyeran con posibilidades de competir y, desde luego, ganar.
Que las Leyes Electorales mexicanas dispusieran al fin que hubiese candidatos de la sociedad civil que no comulgan con los partidos políticos, en definitiva, fue un parteaguas, incluso, llegó a decirse que la respuesta de era de pronósticos reservados debido en virtud del rechazo social a las llamadas organizaciones de interés público, porque dejaron de ser eso desde hacía infinidad de años.
Como no vedad, esta figura legal que permitiría a personas que, como aquellos que lograban aparecer en las boletas electorales como candidatos no registrados, al fin fueran postulaciones de verdad soportadas con el respaldo de electores que dieron sus datos de la credencial para votar con fotografía y que viven en una parte sustantiva del municipio, distrito local o estado.
Al momento de revisar los requisitos establecidos en la Legislación, muchos dieron cuenta de que, eran muchos los candados que se ponían y que sería una labor titánica lograr la candidatura. Con el tiempo se pudo saber que sí es posible y, hasta ganaron elecciones, como fue el caso de Manuel Clouthier Junio una diputación.
O, Jaime Rodríguez Calderón que se lanzó por el gobierno de Nuevo León y para sorpresa de propios y extraños en cantidad de votos pasó por encima de las postulaciones aquellos que, en esa época eran llamados partidos grandes.
Para la elección del año que viene y cuyo proceso comienza en septiembre cercano, las candidaturas independientes están allí como alternativa para la lucha electoral.
Sin embargo, a diferencia de aquello que aconteció hace 10 años cuando se pensó que serían una gran alternativa ciudadana apartidista, ahora no lo son, es más hasta podría decirse que el deseño de décadas para abrir la nominación de candidatos por la vía independiente no funcionará y pronto tendrá que ser eliminado de las Leyes.
Mientras sean peras o manzanas y como la Ley establece que pueden existir candidatos independientes, el Instituto Electoral de Tamaulipas, ya formó la Comisión Especial encargada de seguir ese procedimiento y sus funciones comienzan con el mismo arranque del proceso electoral.
Para ello será lanzada la convocatoria de rigor, a la cual deben de sujetarse los aspirantes, quienes de entrada deben de registras su intención de buscar la aprobación del IETAM para buscar alcaldías y diputaciones locales, así que, como la esperanza muere al último, ojalá que haya muchos, muchos candidatos independientes para todos los cargos.
Este mismo procedimiento aplica para las diputaciones locales y federales, senadurías, presidencia de la República, alcaldías de la Ciudad de México y gobernadores de aquellas entidades que cambiarán titular del Poder Ejecutivo en el proceso del 2024 y de esa forma aprovechar la figura de candidaturas independientes.
Por cierto, no tiene nivel de comparación con la otra alternativa inscrita en las Leyes Electorales desde el 2014, la reelección en una parte de los cargos públicos que se obtuvieron a través de las urnas, como son, alcaldías, diputaciones locales y federales, así cómo, Senadurías, porque tiene una gran demanda, es más, quienes se reeligen creen que debería ser por dos períodos, no por uno.
Los otros.
El lío entre aspirantes a las candidaturas presidenciales de las coaliciones de partidos políticos, registra su punto más álgido y de acuerdo a los procedimientos existentes, la encuesta del Partido Movimiento de Regeneración Nacional, PMRN, y la consulta del PAN, incluso, ya se considera la necesidad de echar a andar la operación cicatriz para evitar que la división en las filas partidistas no llegue hasta las urnas y debilite a los candidatos, al grado de que la participación de los electores en las urnas pueda caerse.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público ya le puso número de aprobación y cantidad en pesos al proyecto de construcción de la segunda línea del acueducto de la Presa Vicente Guerrero a través de la Unidad de Inversión, es el 2316000036 y es por mil 800 millones de pesos que serán considerados en el presupuesto de egresos del año que viene.
La gestión del Gobernador del Estado, Doctor Américo Villarreal Anaya fructificó, porque su equipo de trabajo cubrió todos los detalles técnicos, el último de ellos, de acuerdo con la información proporcionada por el alcalde Eduardo Gattás Báez, fue un estudio de impacto ambiental que se entregó hace poco más de 15 días y también los otros detalles, esos que tienen que ver con las ganas de hacer las cosas a favor de los habitantes de la capital de Tamaulipas.
El ingeniero Raúl Quiroga Álvarez, secretario de Recursos Hidráulicos para el Desarrollo Social, hizo ver que con esa obra se garantizará el abasto de agua para uso y consumo humano de más e 350 mil habitantes, por un periodo de 30 años.
Obvio todos quisieran que la obra ya estuviera realizada, para poner fin al suplicio que se vive por la falta de agua en la capital de Tamaulipas o bien, que mientras eso suceda, llegase las lluvias con un huracán tipo el que se registra por estas fechas en el Pacífico Mexicano.
Cuestión de tiempos, condiciones climáticas, dinero, pero, sobre todo gestión que ya la hay para emprender proyectos de todo tamaño que requieren los habitantes de Tamaulipas.
