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De turistas

Tribuna

Por Javier Terrazas

De turistas

Ahora que estamos en pleno periodo vacacional de semana santa, uno de los momentos de mayor flujo de personas a los destinos turísticos de playa de la entidad, val la pena reflexionar sobre el tema.

Tamaulipas tiene un amplio litoral de 430 kilómetros desde Matamoros a Tampico. Sus principales playas son Miramar en Madero, Badgad en Matamoros y La Pesca en Soto la Marina.

Pero también se encuentran Barra del Tordo en Aldama, Playa  Tesoro en Altamira y Carbonera en San Fernando.

Todas reciben gran cantidad de visitantes en ésta temporada, principalmente jóvenes y adultos de hasta 50 años.

El ajetreo que se da en las playas en ésta temporada no atrae a los mayores de 50 años que buscan espacios más tranquilos y atención de mejor calidad.

La actividad turística es uno de los sectores de la economía nacional que genera una gran derrama económica, es la que tercera en captación de divisas para el país después del petróleo y las remesas.

Por ello, es fundamental que el fenómeno turístico sea estudiado con detenimiento para que si aparece como una de las fortalezas de Tamaulipas, pueda impulsarse un mayor desarrollo.

Y para ello, hay que partir de definir con claridad el concepto de turista, es decir, definir quién es turista y quién no lo es.

Y es muy sencillo, pues tiene que ver con la economía. Ya que en los estudios se considera a aquella persona que sale de su entorno ordinario a otro destino y en el curso pernocta en un hotel, generando un consumo.

Entonces se trata de una persona que sale de su hogar y llega a otra ciudad y contrata los servicios de un hotel, consume en restaurantes y centro de diversión.

No son turistas entonces los residentes de los municipios del litoral que acuden a disfrutar de sus playas, pues están en su ciudad, no duermen en hoteles ni consumen en restaurantes.

Tampoco aquellos que llegan a casas familiares, donde duermen y consumen alimentos, pero acuden a las playas a disfrutar de la naturaleza.

Entonces no es bueno hacer números alegres sobre los visitantes a las playas y la saturación de las mismas, pues la derrama económica no corresponde con esa afluencia.

Hay que valorar más la ocupación hotelera, que da un termómetro real de la presencia de turistas que llegaron de otras ciudades y están generando un gasto en hospedaje y por tanto en otros rubros como restaurantes y centros nocturnos.

Las ciudades con mayor infraestructura hotelera en el litoral tamaulipeco son Madero, Tampico y Matamoros. Y de manera marginal La Pesca en Soto la Marina.

Importante que si se tiene el atractivo de buena playa, se pueda impulsar el desarrollo de mayor infraestructura y que durante todo el año de manera escalonada en los puentes y otros periodos de asueto, se pueda atraer al turismo.

Y un turismo de diferentes segmentos y posibilidades de gasto en las diversas estaciones del año.

Los jóvenes no son necesariamente quienes más gastan en la práctica del turismo.

En esa tarea, deben aplicarse los alcaldes Andrés Zorrilla de Madero, Magdalena Peraza de Tampico, Jesús de la Garza en Matamoros y Habiel Medina Flores, pero más como impulsores de ésta actividad.

Su misión promover la cultura turística. Y que cada eslabón de la cadena o sistema turístico haga su parte de la mejor forma.

Un turista satisfecho siempre regresa. Y lo más importante, recomienda.