Columnas

Dedazo Moreno

Falta uno año y días para la elección presidencial del 2024. Y dos meses para que oficialmente inicie el proceso electoral que se supone organiza el Instituto Nacional Electoral.

Sin embargo, el nuevo INE «Lopezobradorista» permitió que el calendario se adelante.

Con el falso argumento de que el partido en el poder federal Morena, elegirá a «un Coordinador del Movimiento de Regeneración Nacional» y no a un candidato.

Y en el tablero del ajedrez político del presidente Andrés Manuel López Obrador, de cara a la sucesión,  se colocaron las fichas, ahora llamadas en términos chairos «corcholatas».

Mismas que enumero en el orden afectivo de quien manda en el país:

Claudia Sheinbaum Pardo, ex gobernadora de la Ciudad de México.

Adán Augusto López Hernández, ex gobernador de Tabasco y ex secretario de Gobernación.

Marcelo Ebrard Casaubón, ex secretario de Relaciones Exteriores y ex jefe de gobierno de la Ciudad de México.

Ricardo Monreal Avila, ex presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado de la República, ex gobernador de Zacatecas.

Y los de relleno, que juegan el rol de paleros de la favorita.

Gerardo Fernández Noroña Diputado Federal con licencia.

Manuel Velasco Coello, Senador con licencia y ex gobernador de Chiapas.

Los seis recorren el país con evidentes fines de la candidatura presidencia, pero con la simulación de que aspiran a la coordinación del Movimiento de Regeneración Nacional.

Y en las primeras semanas de esa «pre-pre-campaña», para poder insertarla en el calendario electoral,  es más que evidente que el cuadro está montado para favorecer a la dama.

Mientras que como «emergente» por cualquier contingencia que pudiese ocurrir en el trayecto, pisa fuerte el territorio el tabasqueño Adán Augusto López Hernández.

Fernández Noroña y Velasco Coello, replican el mensaje de Claudia con su estilo personal, en especial sus cuestionamientos a la oposición la «Alianza por México» que representan el PRI-PAN-PRD.

Y es que entre más se hunda esa extraña alianza, se pavimenta el camino para la unción de la candidatura inflada de Claudia, que tiene adversarios internos más sólidos.

La estrategia ya está armada desde «AMLOlandia», pues solo a través de Claudia se mantendría la injerencia en el gobierno central más allá del 2024.

Esa es la línea evidente.

La cargada se nota fuete en los actos que está realizando en el país  Sheinbaum.

En particular cuando recorre alguno de los estados de los catorce gobernadores que se abrieron para esa causa.

Y por si eso no fuese suficiente, desde las esferas del poder federal se mueven los hilos para exhibir a quienes hacen algún esfuerzo por cuestionar el proceso o a la favorita..

Las «descobijadas» e incluso «mañanerazos» al ex carnal Marcelo así lo revelan.

Montar a la ex jefa de gobierno de la ciudad de México como puntera indiscutible de las encuestas anticipadas a las encuestas morenistas, es el objetivo de ésta pre-pre-campaña.

Y de esa manera mostrarla a la hora de las defunciones internas  de los partidos como la abanderada natural.

La oficialización del disfrazado «dedazo morenista».

Un dedazo presidencial más burdo que el de los tiempos mozos de la hegemonía del PRI.

Ya se verá la cargada en los próximos días en Tamaulipas.

Cuando las corcholatas recorran los municipios tamaulipecos.

Se verá para quien van las palmas.

Y parra quien las zancadillas.

Salvo su mejor opinión.

Buen fin de semana.

Y que julio sea buenísimo para usted y su familia.