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Doctores y política

Gaceta.

Por: Raúl Terrazas Barraza

Doctores y política

Este martes se cumplen 12 años del asesinato del doctor Rodolfo Torres Cantú, perpetrado según informes de aquella época y que no han variado hasta la fecha por sicarios de quienes viven y delinquen al margen de la Ley, porque el candidato no pactaría con ellos sobre ningún asunto una vez que fuera Gobernador de Tamaulipas.

El doctor Torre Cantú, sería el primer mandatario de Tamaulipas que había sido Secretario de Salud de la entidad, Diputado Federal y funcionario municipal y 12 años después otro hombre de la medicina, el doctor Américo Villarreal Anaya, quien fue durante muchos años Subsecretario de Salud, incluso bajo las órdenes del malogrado candidato, será el próximo Gobernador de la entidad, esto es, a partir del primero de octubre.

Eran por ahí de las 10 de la mañana cuándo la noticia corrió como reguero de pólvora y desde luego en medio de la incredulidad, porque nadie en sus cabales podía asimilar a boca de jarro que el hombre que se dedicó a escuchar a las y los tamaulipecos de todos los sectores con la finalidad de ser su aliado desde la Gubernatura de la entidad, había sido asesinado por la carretera al Aeropuerto de Ciudad Victoria, con la finalidad de llegar a esa terminal y abordar un avión que lo llevaría a los cierres de su campaña en las ciudades de Valle Hermoso y Matamoros.

Aquello fue caótico, y las preguntas sin respuesta se escuchaban en todas partes, sobre todo una, porque a él, decía la gente, si era buena persona y traía en su mente y en su corazón el sentir popular de miles y miles de personas que le abrazaron, conversaron y creyeron de manera fiel en él para convertirlo en más que un político en el líder que los tamaulipecos necesitaban.

Hace un mes y medio, estuvo en la agenda los medios de comunicación, esto del asesinato, porque el licenciado Manuel Muñoz Cano, quien es dirigente del Partido Verde Ecologista de México y que anduvo en actividad en la campaña proselitista por la coalición entre su partido, el PT y el PMRN, debió de hablar en una conferencia sobre el papel que jugó por el rol que tuvo de Coordinador de los trabajos políticos y señalar que fue uno de los que, desde siempre han demandado el esclarecimiento del asesinato.

Torre Cantú tendría hoy 58 años de edad, perdió la vida a los 46 años, cuando estaba pleno en sus facultades profesionales y políticas y todo mundo estaba cierto de que sería un buen Gobernador de la entidad, además durante los 12 años que van de su fallecimiento la gente se duele de la irreparable pérdida que sufrió el priísmo de esta entidad, incluso, hay quienes creen que terminado su sexenio, el siguiente su partido, el PRI, se hubiese mantenido en la administración estatal.

De del dolor ciudadano por el asesinato, apareció en la escena un libro escrito por su hija Paulina Torre de la Garza, en el que expresa el entusiasmo que el Doctor tenía por cumplir las expectativas de quienes creyeron en él y hasta había solicitado la solidaridad de su familia para entregarse a servir a los tamaulipecos.

Describe el tipo de padre que era y de las enseñanzas que a pesar de su corta edad, ella, su hermana Beba y su hermano Rodolfo supieron aquilatar, obvio, sin dejar de lado el gran dolor de perder a ese hombre bueno que fue el doctor Rodolfo Torre Cantú.

Podría mantenerse la demanda de aclaración del crimen y el castigo a los culpables, pero, la verdad de las cosas es que eso ya no resuelve nada, el daño personal, familiar y social se hizo en forma artera y no se puede reparar, solo quedan sus enseñanzas y el recuerdo siempre en positivo.

Seguro el Gobernador Electo de Tamaulipas, doctor Américo Villarreal Anaya tendrá alguna palabra también en positivo del hombre que supo compaginar la atención medica con la política y llevarla a un plano de alta participación ciudadana, es decir, hay un binomio de buenos resultados, los doctores y la política.

Los otros.

Como quiera el alcalde de Ciudad victoria, Tamaulipas, Eduardo Gattás Báez, va a su oficina con amparos en la mano y se traslada a las colonias para asistir a eventos con los ciudadanos, con las mismas hojas de los amparos en a la vista, por aquello de que puedan aparecer agentes y traten de detenerlo.

Algo similar debe de suceder con el alcalde de Reynosa, también de extracción regeneracionista, Carlos Peña Ortiz, para evitar cualquier eventualidad con la justicia. La diferencia es que éste, el de Reynosa, acaba de aparecer otra vez en eventos públicos y para no buscarle tres pies al gato, al saber que tiene cuatro, se reunió con su equipo de colaboradores en el otro lado, para que la sesión discurriera con tranquilidad y sin llamadas de advertencia.

Este martes, comparecen ante el Congreso del Estado, la secretaria de Salud, doctor Gloria de Jesús Molina Gamboa y el secretario de Turismo, Fernando Olivera Rocha, de acuerdo al calendario que según esto había aprobado la mesa directiva del Poder Legislativo, se trata de las comparecencias más distantes entre la fecha de presentación del Informe de Gobierno y las sesiones con diputados en las que se expone en forma más detallada el reporte de las dependencias.

Usual es que entre una semana y dos del Informe de Gobierno, los secretarios del Gabinete comparezcan par aclarar cualquier duda que los Legisladores. El VI Informe de la administración estatal fue el 15 de marzo y las y los secretarios se reúnen 13 semanas después con las y los Diputados para hablar del reporte entregado por el Gobernador.

Obvio, la fecha puede no decir mucho, en un escenario donde aquello que es importante es que los Legisladores no tengan dudas sobre el documento que año con año debe de entregarse al Congreso del Estado.