Columnas

EL BOSQUE DE BIRNAM AVANZA…

EN CONCRETO

Por: Blanca Leticia Guerra

EL BOSQUE DE BIRNAM AVANZA…

O LA MARCHA FEMINISTA.

Macbeth, guerrero sanguinario, primero al servicio del Rey Duncan y después su asesino, recibe un mensaje de las brujas: NADA AMENAZARÁ SU VIDA HASTA QUE EL BOSQUE DE BIRNAM NO AVANCE HACIA ÉL. Acción imposible para la mente humana… pero el bosque se avanzó.

Hartos de la violencia ejercida de quien sucedió a Duncan, el ahora Rey Macbeth, planearon una estrategia: decidieron camuflarse, tomaron ramas de arboles y poco a poco avanzaron, se fueron abriendo camino hasta que el Bosque de Birnam llegó hacia él…

Hace unos años, cuando todavía vivía en la CDMX, luego de volver de la marcha feminista, vi un video tomado por un dron en birds eye view que dejaba ver las copas de los arboles, en un espectáculo impresionante, llenas de jacarandás que se camuflaban con las ropas moradas de los contingentes que con consignas como “TRANQUILA, HERMANA, AQUÍ ESTÁ TU MANDA”, “NO SE VA A CAER, LO VAMOS A TIRAR”, “LA CULPA NO ERA MÍA, NI DE DÓNDE ESTABA, NI DE CÓMO VESTÍA” marchaban, y daba la impresión de que los arboles estaban avanzando…

Hoy, en Reynosa, en mi casa, con todo el miedo del mundo porque definitivamente manifestarse en esta ciudad para nada es lo mismo que hacerlo en la CDMX, decidí asistir a la marcha.

Un nudo en la garganta porque estas marchas evidencian la problemática, pero también un destello de esperanza de saber que habemos mujeres que ya no permanecemos en el silencio. A pesar de los pesares: de los juicios, de los ataques, del miedo… en Reynosa ahora se grita, se exige.

Pero ¿Marchar sirve de algo? Sí.

Si bien es un acto simbólico porque definitivamente lo que hay que hacer es presentar denuncias formales, es precisamente ahí donde la cosa se atora, en el sistema de justicia retrógrada que tenemos, donde hasta hace muy poco fue implementado el termino feminicidio para referirse a las muertes violentas hacia mujeres por razón de género.

Sin embargo no todo está perdido, estas marchas que algunos tanto satanizan, han dado resultados, partiendo desde el primero, perder el miedo a nombrar la injusticia, a exigirla, y de ahí, de la furia, algunas mujeres han encaminado el proceso para formular leyes para la proyección de todas.

Como la Ley Olimpia que castiga el acoso digital y tipifica como un delito hacia la integridad sexual el grabar, tomar fotos o difundir imágenes o mensajes con contenido sexual sin consentimiento; la Ley Ingrid, que castiga a quien difunda imágenes de víctimas de agresiones hacia mujeres; Ley Sabina, que implica que para cualquier tramite se exige el documento que comprueba que no estás en el Registro Nacional de Obligaciones Alimentarias, en el que se exhibe a cualquiera que no cumpla con la obligación de brindad sustento y supervivencia a sus hijos; Ley 3 de 3 que implica que ningún agresor, deudor alimenticio o acosador, pueda ocupar un cargo de poder.

Estas leyes son en realidad un conjunto de reformas legislativas que nos permiten ir avanzando poco a poca y salir del rezago de desigualdad en el que nuestro sistema se encuentra.

¿Que las formas no nos gustan? Deberíamos mirar entonces hacia nosotros mismos y cuestionarnos porqué nos quejamos de las formas pero no de la injusticia.

De la forma que sea… el Bosque de Birnam está avanzando en Reynosa.