Columnas

La obra pública de la discordia

David Ed Castellanos Terán

@dect168

La obra pública de la discordia

La designación ordenada y correcta de los recursos públicos siempre resulta ser una misión imposible para nuestros gobernantes. Algunos son bastante burdos para concretar sus negocios, mientras que otros saben repartir un poco a cada grupo de poder.

En México se sabe de obras destinadas a los amigos y familiares del presidente o de los mismos gobernadores e integrantes del gabinete presidencial; lo malo es que no es nada nuevo. Hay temas de sobra, desde asignaciones de importantes construcciones o negocios vinculados con la reforma energética. Usted ponga el ejemplo que más rápido recuerde.

Por ejemplo, en Tamaulipas, la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) tiene una serie de cuestionamientos y dudas que desahoga con la Secretaria de Obras Públicas del Gobierno del Estado, Cecilia del Alto López quien atenta, escucha la postura de los constructores tamaulipecos.

Ellos consideran que la inversión del estado se aplica especialmente en el norte de la entidad, preferentemente en el municipio de Reynosa, mientras que para el sur de Tamaulipas, únicamente se destinan para este año, 61 obras repartidas para más de cien constructores de los municipios de Altamira, Madero y Tampico; aunado a esto las obras de licitación pública del estado solamente darán un anticipo del 10 por ciento, esto en el mejor de los casos, porque han externado que a veces no sale ni el anticipo para el inicio de la obra.

Pero es aquí en donde entra la diplomacia, capacidad política, diálogo fluido y dinámico de la titular de la dependía estatal. Cecilia del Alto, quien les explica el porque la decisión que sorprende a los constructores tamaulipecos, pues resulta que hay algunos contratistas que del anticipo se financian sus empresas para otros pagos.

¡Ufff! La CMIC, parece una bomba de tiempo, pero igual todo indica que el gobernador tiene a la persona iniciada para mantener el control de las cosas. Vamos a ver qué sucede.

Porque otra inquietud de los constructores huastecos, se refleja en la aparente designación de las obras más importantes para compañías que en el concurso ocupan el octavo lugar en costos, sin embargo los primeros suelen ser desacreditados bajo argumentos que no dejan del todo contentos a los empresarios de la construcción. Aquí Cecilia del Alto, solo escucha y con seguridad, acentúa que todo esta en el marco de la ley. Al tiempo.

Es así como han venido transcurriendo los primeros nueve meses de la administración añorada de los vientos del cambio que comanda el panista, Francisco Javier García Cabeza de Vaca en Tamaulipas, quien por designación nombró a Cecilia del Alto, como la encargada de reflejar la  imagen de un trabajo incluyente entre constructores y mandatarios como parte del plan de trabajo, con recursos a ejercer de la mejor manera, en todas las regiones de Tamaulipas.

davidcastellanost@hotmail.com