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Los diputados holgazanes

Opinión pública

Los diputados holgazanes

Por Felipe Martínez Chávez

Cd. Victoria, Tamaulipas. – Debe haber mucha desesperación entre actores políticos del PAN, al saber que poco a poco el poder transexenal se va extinguiendo para volver a una realidad que no es muy agradable: Quedar fuera de las nóminas del erario.

Se valen de mentiras y falsedades. Diga usted si no.

El miércoles a las 12:51 horas el CDE del PAN subió a redes escrito “de legisladores locales y federales”, denunciando amenazas recibidas por la magistrada Blanca Eladia Hernández Rojas, del Tribunal Estatal Electoral, “para ausentarse de la sesión” privada convocada para las 11:00 horas de ese mismo día.

No era algo nuevo porque el presidente del Tribunal, Edgar Danés Rojas, un día antes había informado a la Sala Regional Monterrey del TRIFE, que en esa fecha se reunirían para resolver el “incidente de aclaración de sentencia” interpuesto por el diputado panista Félix Fernando García Aguiar, en su afán de recuperar el liderazgo del Congreso.

Con fama de marrullero, el escrito de los panistas debió haber sido una ocurrencia más de Luis René “Cachorro” Cantú, jefe estatal del PAN. No aportó nombres y menos firmas. Una “volada”. Es muy dado a la desinformación, crear historias y novelas sobre alerta de falsas bombas y atraques cardiacos.

Según el documento, en la sesión privada, “se confirmaría dejar sin efectos todas las actuaciones llevadas a cabo en forma ilegal por los diputados locales de Morena en el Congreso del Estado”.

Falso. No hubo amenazas ni presiones de los diputados morenos. A esa hora la señora Hernández asistía en Morelia, al Foro de Acceso a la Justicia Político Electoral organizado por la facultad de Derecho de la Universidad Michoacana.

Doña Blanca gozaba de cabal salud y no estaría -sabían los panistas-, en la reunión del Tribunal porque carece del don de la ubicuidad para estar al mismo tiempo en dos lados.

El golpe llegó más allá porque los magistrados que se quedaron, no invalidaron el ejercicio morenista en la Junta de Gobierno del Poder Legislativo, sino que confirmaron su liderazgo, con lo cual el grupo azul se aleja más de la posibilidad de reconquistar el mando.

Votaron en contra los magistrados Gloria Graciela Reyna Hagelsieb, Edgar Arroyo Villarreal y Edgar Danés Rojas. A favor de su propia ponencia René Osiris Sánchez.

Este y otros acontecimientos parecen ser el principio del fin del poder transexenal en el legislativo. El tiempo se les acaba, a partir del uno de octubre les queda un año de ejercicio.

Morena tiene las riendas del Congreso desde enero. Los tres magistrados debieron entender que no es posible derrumbar trabajos de siete meses, solo por favorecer la ponencia del magistrado Sánchez Rivas, en pleitos personales con los actores de la 4TT.

El fin se acelera. Trascendió que la Fiscal Especializada en Delitos Contra Mujeres, Julieta Castillo Alemán, comenzó a hacer su chamba en torno a denuncias por violencia de género que elevaron diputadas, derivado de la “toma” del Palacio Legislativo el 10 de julio último.

Por la tarde tenían cita: Imelda Sanmiguel Sánchez, Liliana Alvarez Lara, Nancy Ruiz Martínez, Luis René “Cachorro” Cantú, Carlos Fernández Altamirano y Marina Ramírez Andrade, todos legisladores. Para la violencia de género no tienen fuero.

Igual trascendía que, en torno a otros expedientes, estaban citados la golpeadora Leticia Sánchez Guillermo para el 31 de agosto; Edmundo Marón y Félix García para el 25. Otros ya se presentaron.

Hablando de diputados, los del PAN tienen fama de ser holgazanes pero nadie, a pesar de sus faltas, les ha descontado de la dieta o quincena.

A la última plenaria -extraordinaria- se hicieron la “pinta” once de ellos. Justificaron falta Nora Gómez González y Edmundo José Marón Manzur, de quienes se dice están por “chapulinear” al bando de Morena, algo que está por verse.

A las ordinarias de la Comisión Permanente no asisten los celestes. Han acumulado tantas faltas que merecen una quita en el sueldo.

Lo anterior recuerda que, en un acto de burla y cinismo, Francisco Javier García, cuando fue diputado local entre el uno de enero del 2008 y el 29 de septiembre del 2010, se coronó como campeón de faltas. De 103 sesiones ordinarias, extraordinarias y solemnes inasistió a 43, o sea el 43 por ciento, y le pagaron completitas sus quincenas.

En el último año del trienio, 10 de febrero a 29 de septiembre del 2010, la directiva realizó 26 sesiones, a las cuales el “gringo” solo se presentó ¡en tres!. Ocho meses de vago.

Otra de las ”campeonas” en faltas en la historia del Congreso es Leticia Sánchez Guillermo, la chapulina que bailoteó dos veces entre morena y Pan.

En su primer periodo, dos años, uno de octubre del 2019 y el uno de septiembre del 2021 (ahora está en su segundo), acumuló 42 inasistencias de un total de 107 sesiones a las que fue citada.

Cuando es diputada por segunda vez -reelección por Morena- lleva el mismo camino, el de la holgazanería ¿no cree usted que es justo que le descuenten? La Ley dice que a las tres faltas debe llamarse al suplente.