Misterios del cielo
David Ed Castellanos Terán
@dect1608
Misterios del cielo
La absurda guerra contra los cárteles de la droga desatada en el pasado sexenio de Felipe Calderón, obligó a la Fuerza Aérea Mexicana y Fuerza Aeronaval de la Marina Armada de México modificar sus aviones de entrenamiento para convertirlos en feroces y peligros “casuarios”, dispuestos a atacar a los monstruos de acero construidos por los criminales.
El expresidente de México Enrique Peña Nieto se dispuso a robustecer las unidades de combate terrestres, áreas y marítimas para sumarlas a las labores de patrullaje, combate y neutralización de los integrantes de la delincuencia organizada, civiles a los que el Gabinete de Seguridad Nacional (GNS) llamó “objetivos primarios”.
Entonces hasta antes de heredar la presidencia al obradorismo, el Gobierno de México habría adquirido al menos medio centenar de aeronaves Beechcraft T-C6 Texan II, puestas a disposición de la SEDENA y SEMAR, pero esos aviones, salen de sus fábricas en Estados Unidos como unas aves de acero “tímidas”, algo así como si fueran dóciles pajarracos para entrenamiento militar de los nuevos pilotos en defensa de la soberanía nacional; sin embargo, el gobierno del entonces presidente Peña Nieto los convirtió en los fúricos “casuarios”, el ave más peligrosa del mundo de apriencia prehistórica, dotado con unas enormes garras poderosas capaces de perforar cualquier superficie y causar heridas mortales. Ataca como un velociraptor.
En eso convirtió EPN, los Beechcraft T-C6 Texan II, que precisamente este fin de semana en una maniobra ultra secreta, de la que ni la Secretaría de la Defensa Nacional (SDENA) ni sus hermanos de armas los de la Marina-Armada de México (SEMAR) han querido informar qué fue lo que sucedió, realmente nadie lo sabe.
Los Beechcraft T-C6 Texan II, ahora dotados como el casuarios, pero con enormes ametralladoras y lanzacohetes para atacar desde el aire a los enemigos internos de la nación, surcan el cielo mexicano; pocas veces se dejan ver por la población.
De la nada aparecen entre las nubes, como si tuvieran una compuerta en el sol y cumplen con su misión. Son difíciles de localizar, tan igual que el casuario experto en perderse y camuflarse en la selva, tan así, que el domingo poco antes del medio dia, sin más, fue localizado el tanque de combustible de una Beechcraft T-C6 Texan II, a unos 20 metros de la carpeta asfáltica de la Carretera Federal 180, Matamoros-Puerto Juárez, Quintana Roo, a la altura del municipio de González en Tamaulipas, a unos 87 kilómetros al norte de Tampico, del mismo estado tamaulipeco.
Han transcurrido más de 48 horas, y el silencio oficial de la Fuerzas Armadas, genera la especulación de una sociedad que aún confia en el General Luis Cresencio Sandoval González, y en el Almirante Secretario José Rafael Ojeda Durán; sin embargo, el silencio asfixia la credibilidad de las Fuerzas Armadas, sobre todo cuando un hecho como este se suscita en Tamaulipas, la ruta por excelencia de los barones de la droga, empresarios del mercado fuera de la ley y del alcance del Sistema de Administración Tributaria (SAT), sin que esto signifique que los de la ruta del Golfo, no tengan para comprar honradez y valentía.
En la intimidad … ¡al fin! Rogelio Ramírez de la O, oficialmennte se convirtió en el tercer secretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP) del presente mandato presidencial, luego de que la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados avaló su nombramiento. Por cierto ya el siguiente mes de septiembre, rendirán protesta los nuevos legisladores, entre ellos, la tampiqueña Rosa María González Azcárraga, la abanderada panista busca integrarse en las comisiones de Seguridad y Equidad de Género, sin embargo, aspira a presidir la de Turismo, Pesca o Deportes ¡trae ganitas la panista!