Columnas

Morales Melgoza, vocero de la mojigatería

Remache del cambio

Por: Enrique Zúñiga Castillo

Morales Melgoza, vocero de la mojigatería

Hace unas semanas el regidor maderense José Luis Hinojosa Banda afirmó públicamente que solicitaría evaluar el desempeño de la Dirección de Atención a la juventud en el gobierno municipal.

En esa ocasión el edil, pese a manifestar su rechazo a “tomar cartas fuertes” cuestionó la falta de resultados de la dependencia dirigida por Roberto Enrique Morales Melgoza. Pedía la entrega de resultados y los informes de los trabajos ejecutados debido a la trascendencia de la función. Esta Dirección se encarga de responder a las demandas y problemas de adolescentes y jóvenes.

Otras voces se sumaban en ese tiempo a las críticas contra el novel  funcionario titular de la Dirección de Atención a la Juventud. Se afirmaba el desconocimiento de Morales Melgoza sobre las necesidades más elementales que afrontar y la falta de diseño de estrategias adecuadas.

Es interesante la declaración hecha esta semana por Roberto Enrique Morales. Expresó su negativa a entregar preservativos a los adolescentes y jóvenes durante el playazo en Miramar. Se mostró en contra porque, según él, sería una invitación a tener relaciones sexuales.

No se puede gobernar a partir de creencias, de ocurrencias ni menos bajo prejuicios. Las políticas públicas deben partir de datos concretos para entregar soluciones.

El problema del incremento de embarazos y enfermedades de trasmisión sexual en niños, adolescentes y jóvenes es palpable.

Hace poco, se difundió que tan sólo en dos escuelas secundarias de la zona sur del estado se detectaron cerca de 30 embarazos en alumnas de dichos planteles.

La prevención del problema debe encaminarse en varias vertientes. Una es la de trasmitir conocimientos y educar para la sexualidad, pero también la de entregar herramientas para la protección. Por eso no parece disparatada la idea impulsada en otras entidades, la de instalar máquinas expendedoras de condones en las escuelas secundarias, preparatorias y universidades. Sn embargo, esta propuesta, como el reparto de condones en las playas, encuentra el rechazo de los sectores más conservadores. Interpretan que obsequiar preservativos es una invitación implícita a los jóvenes para iniciar una vida sexual activa.

Mira, amable lector, con o sin condones, el número de embarazos en adolescentes va en aumento. Sin protección e información este segmento poblacional se encuentra expuesto a enfermedades y las consecuencias de ser padres a muy temprana edad.

Algo debe hacerse, no sólo asumir posiciones retrógradas en un tema tan delicado de salud pública. Es asunto de prevención y es una lástima que un muchacho encargado de una de las áreas de la administración pública municipal en la urbe petrolera sea hoy el vocero de la mojigatería.

¡Qué suene la banda, Alma!

La insensibilidad y la ignorancia han prevalecido en la decisión de desparecer la Banda Municipal de Música de Altamira Tamaulipas. En contraste, síndicos y regidores han insertado en las listas salariales a hijos, ahijados, sobrinos, cuñados, parejas, guachomas y otros especímenes. Esta política forma la suave brisa del cambio encabezada por Alma Laura Amparán, la presidenta municipal. ¿Pensar en reelección? De que se van, se van.

contrarraya@gmail.com