Columnas

Otra Blue Flag beach para el Golfo de México

David ED Castellanos Terán

@dect1608

Otra Blue Flag beach para el Golfo de México

Desde hace más de una década se estaba esperando la llegada de esta gran ola que no se da en cualquier costa. Como los surfistas esperan sentados sus mejores olas, así estuvo durante años el destino Tampico-Miramar; fue primero el vendaval de la guerra de narcos lo que impidió todo; luego cuando parecía que se lograba subirse a la ola de la trascendencia internacional, llegó la crisis mundial por la pandemia del Coronavirus que volvería a frustrarlo todo. Finalmente, ondea con orgullo en la playa de Miramar el reconocimiento ecológico más grande del mundo para playas, marinas y barcos.

La Blue Flag, surfeó desde Dinamarca, sede de la Fundación Europea de Educación Ambiental, hasta Playa de Miramar en la costa sur de Tamaulipas, para ondear con orgullo y convertir esta playa tamaulipeca en el segundo destino de sol, arena y mar de todo el Golfo de México que tiene la dicha de izar tan exigente reconocimiento del ámbito turístico mundial, y además llegó para romper el viento junto a la bandera del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia, que ha hecho de Miramar, la primera playa incluyente del Atlántico Mexicano.

En el iniciante año de 2018, cuando las olas aún eran grandes, feas y peligrosas por la guerra del narco, cuando las condiciones en Tampico eran otras, y el régimen cabecista apenas comenzaba su segundo año de mandato, la entonces titular de la Secretaría de Turismo del Gobierno de Tamaulipas, María Isabel Gómez Castro, ya había trazado las prácticas a realizar para mejorar el surf tamaulipeco y poder cumplir con los criterios establecidos y las normas de calidad, seguridad y la más dificil, los parámetros en educación ambiental para acceder al Blue Flag.

El afamado certificado que solamente tenía en el Golfo de México la playa Tortuguero en Veracruz, una Marina y otras 25 más playas del pacífico mexicano debería disntinguir a Tampico-Miramar en el tiempo de todos, en la era de los vientos de cambio. El certificado Blue Flag es un premio que todo aquel que se dedica al turismo anhela tener, es como la codiciada ola para el surfista.

La misión se cumplió, la bandera que baila con el viento en apenas 49 países y 4 mil playas del mundo fue izada en la costa sur de Tamaulipas, la Playa de Miramar, el destino turístico por excelencia del estado y del noreste mexicano, el paisaje y zona de esparcimiento que prefieren casi el 80 por ciento de los paseantes nacionales y extranjeros que visitan Tamaulipas.

Fue una pena que el secretario de Turismo Federal, Miguel Torruco Marqués, no haya podido acompañar al gobernador de Tamaulipas, Francisco Javier García y al alcalde morenista de Ciudad Madero, Adrián Oseguera Kernion, en el izamiento de bandera, nada como su presencia hubiera sido tan reconfortable en una temporada de huracanes y tormentas troplicales.

En la intimidad… Morena en Tampico no ha podido digerir la aplanadora que le pasó. Sigue peleando en la mesa lo que no pudo en el territorio; esperemos los resultados de la Sala Monterrey del TEPJF sobre la impugnación de la elección, aunque ya sabemos el resultado: el huracán Chucho Nader barrió con tal fuerza que es de pena ajena que los nuevos morenos estén exigiendo «voto por voto, casilla por casilla». Vendieron ilusiones, hoy la triste realidad los ha puesto en su lugar.

davidcastellanost@hotmail.com