Columnas

Por una elección ejemplar

Gaceta.

Por: Raúl Terrazas Barraza

Por una elección ejemplar

Al margen de las malas notas de información que se generan desde las ínsulas de personajes del Partido Movimiento de Regeneración Nacional, el escenario para las elecciones de este cinco de junio con las cuales se cambiará al Gobernador de Tamaulipas se mantiene incólume, al no resultar dañado por la intensidad del golpeteo que se dio en los últimos días de las campañas proselitistas.

Fue un poco difícil para la ciudadanía dejar de lado el bombardeo publicitario tanto en medios electrónicos en los cuales se pasaron los spots que fueron aprobados por el INE y el IETAM y difundidos en los tiempos oficiales que las estaciones de radio y de televisión otorgan al Gobierno de la República en reciprocidad a la explotación de concesiones del espacio para la transmisión de las señales.

La gente se había acostumbrado de escuchar, leer y recibir comentarios sobre programas de trabajo y acciones comprometidas por los candidatos a la gubernatura, con la idea de captar su atención y obtener el respaldo de los electores, mismo que se midió durante las campañas a través de las empresas dedicadas a las encuestas sobre preferencias electorales.

Los tiempos del proceso eleccionario están previstos y bien especificados en la Legislación Electoral, misma que es interpretada por los funcionarios de las instituciones autónomas responsables de la organización de las elecciones, de ahí que, desde mediados del pasado septiembre de 2021 en que comenzaron las acciones y que concluyen con la votación de este cinco de junio y los resultados que se obtengan de las casillas, todo estuvo calendarizado.

Hubo tiempos para que los partidos obtuvieran la aprobación de las autoridades para postular candidatos, así también, para la presentación de sus plataformas electorales, la realización de sus procesos internos para la definición de las candidaturas, la legitimación de quienes quedaron, su registro y las campañas proselitistas que concluyeron este primero de junio, de ahí que, en función del calendario electoral, casi todo, está hecho.

Falta la apertura de casillas a las ocho de la mañana del domingo, la jornada de votación hasta las seis de la tarde y el cómputo de los votos, el llenado de las actas y el anuncio del ganador de la elección, con lo cual todo se habrá consumado, excepto claro, de las impugnaciones que pueden presentar los actores políticos sobre la base de la Ley de Medios de Impugnación de Tamaulipas.

Esto que falta del proceso en cifras, es la instalación de cuatro mil 777 mesas de votación en las que, los 19 mil funcionarios de casilla atenderán a dos millones 737 mil 311 personas del listado nominal que tienen credencial para votar con fotografía y que decidirán a quien quieren del titular del Poder Ejecutivo, para que despache en la oficina principal del Palacio de Gobierno ubicado en el 15 Juárez de Ciudad Victoria.

Operarán por primera vez en una elección de Tamaulipas 50 urnas electrónicas, 10 de ellas en el Distrito 14 de Ciudad Victoria y cinco en los Distritos, dos de Nuevo Laredo, cuatro de Reynosa, en Río Bravo, en el 10 de Matamoros, en el de Mante, de Ciudad Madero y el 22 de Tampico, en este tipo de urnas se podrán recoger 32 mil 876 votos, de acuerdo con el listado nominal de las secciones en las que estarán estos artefactos que vienen de usarse con éxito en la reciente elección de Coahuila.

Además, se recibirán dos mil 481 votos de tamaulipecas y tamaulipecos que radican en 32 países del orbe, mil 756 usarán la vía electrónica para hacerlo y 725 comenzaron a enviar su voto por correo, la mayoría de quienes votarán desde fuera de México radican en Estados Unidos.

Los observadores electorales que se registraron de conformidad con la convocatoria pública que se dio a conocer desde el pasado mes de septiembre, son 522, de ellos 222 son mujeres y 300 varones, por ello es que, delante del Vocal de la Junta Local Ejecutiva del INE, Sergio Ruiz Castellot, el presidente del Consejo General del IETAM, licenciado Juan José Ramos Charre ha dicho que todo está listo y dispuesto para la elección loca de Tamaulipas, en la cual, miles de personas han puesto alma, corazón y vida, con la idea de que todo salga mejor que en las elecciones recientes, en especial, que los resultados sean incuestionables y que no se produzcan discrepancias que pongan en entredicho el éxito de la elección.

Es preciso tener en cuenta que los tamaulipecos no saben de broncas electorales casi desde las elecciones intermedias del sexenio de Don Enrique Cárdenas González, cuán varios edificios de presidencias municipales fueron incendiados debido a las inconformidades ciudadanas y que, casi costaron la renuncia al entonces mandatario, por ello la aseveración de que, este proceso electoral para cambiar al gobernador, debe de ser ejemplo en la organización, la votación y el comportamiento de todos los actores del mismo

Los otros.

Ni como pensar que algún día, sucediera que los trabajadores de PEMEX se quejaran del servicio que les otorga el Hospital que su empresa tiene en Ciudad Madero y menos que con manifestaciones de calle exigieran la salida del Director, doctor Javier Luna Martínez a quien responsabilizan de la mala calidad de la atención y que los especialistas poco a poco se han ido de la institución por problemas de carácter administrativo.

Los Hospitales de PEMEX, como los de SEDENA y la Secretaría de Mariana, eran algo así como garantes del buen servicio y orgullo de los trabajadores petroleros, quizá todavía se mantenga ese criterio para los de la milicia, pero, en el caso de Petróleos las cosas se complicaron y ahora los trabajadores que lidera José Francisco Santana Bolaños, pusieron al descubierto la nueva realidad del nosocomio ubicado en el sur de la entidad.

Quizá no logre ubicarse que la mala calidad de la atención para los petroleros que cubren sus aportaciones para contar con buen servicio médico tiene relación directa con la nueva forma en que PEMEX es dirigido desde el Gobierno de la República, por tanto, vale la pena que los dirigentes sindicales volteen a ver la situación de forma global y se percatarán que el mal viene desde arriba, porque a los nuevos directivos no les interesan los trabajadores.

El Hospital de PEMEX ubicado en Ciudad Madero, tuvo muy buenos protocolos y siempre se procuró la calidad y se medían todo tipo de resultados, solo que, las codas cambiaron y ahora transita por el difícil camino de la denuncia pública por la mala calidad de los servicios, por ello, si Don Joaquín Hernández Galicia, reviviera de pura vergüenza estaría de nuevo en dónde se encuentra, como gran líder que fue.