PRESIDENTE DE EL SALVADOR EXPULSA A PERIODISTA MEXICANO
La @ Red
POR RUBEN DUEÑAS ARIZMENDI
PRESIDENTE DE EL SALVADOR EXPULSA A PERIODISTA MEXICANO
El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, ordenó al periodista mexicano Daniel Lizárraga (@danliza ) salir del país, siendo que es uno de los periodistas más destacados de América Latina, editor del periódico digital El Faro, decisión drástica que tomó el mandatario con el argumento de que @Danliza no pudo demostrar que es periodista.
El director de El Faro, Carlos Dada, denunció que agentes del gobierno se presentaron el jueves en la casa de Lizárraga, para notificarle “que debe abandonar el país” y para ello le dan un plazo de cinco días.
Durante su participación en el diálogo de la Fundación Casa América Catalunya, sobre la libertad de expresión en Centroamérica, Danliza consideró que ésta acción es para limitar el ejercicio periodístico.
“Tramitábamos el permiso de trabajo del periodista Daniel Lizárraga y ayer se presentaron agentes del gobierno en su casa para notificarle que tiene cinco días para abandonar El Salvador y que su permiso ha sido denegado “porque no ha podido demostrar que es periodista”.
Lizárraga es uno de los periodistas más destacados de América Latina, maestro de la Fundación Gabo y reconocido por sus investigaciones contra la corrupción.
Dada consideró que ésta acción es una forma más de acoso, sin embargo, dijo que, a pesar de todos los ataques del gobierno “seguiremos haciendo periodismo en El Faro, porque ese es nuestro compromiso con nuestros lectores”, remarcó.
El periodista mexicano Daniel Lizárraga informó el jueves –8 de julio– que viaja a México por la vía aérea para cumplir en tiempo y forma el plazo que le dio el gobierno del presidente de El Salvador, Nayib Bukele, para abandonar el país, dijo al llegar al aeropuerto internacional ayer en la mañana.
En lo que nos parece un reto abierto de la delincuencia organizada en contra de las autoridades municipales, estatales y federales, y de hecho para nosotros como analistas políticos, lo es, así lo creemos ya que un grupo de hombres armados, que operan en Nuevo Laredo, Tamaulipas, abrieron fuego con rifles de alto poder en contra de un número indeterminado de agentes de la Policía Estatal que viajaban en un autobús de la Secretaría de Seguridad Púbica, los que se vieron en grave peligro de ser abatidos dada la capacidad de fuego de los violentos o chicos malos. Lo que para nosotros evidencia que al gobierno ya le perdieron el respeto, que por muchos años le guardaron a los gobiernos anteriores.
Un reporte policial señala que los hechos ocurrieron a las 21.40 horas del martes en la carretera Nuevo Laredo-Monterrey, la que supuestamente está súper vigilada por elementos de la Sedena, Marina y Guardia Nacional, los que por lo visto no paran bola o a la hora de la verdad le sacan al bulto.
Custodiados por otras patrullas de las mismas corporaciones los agentes que viajaban en el camión agredido por los narcos se dirigían a Ciudad Victoria, debido a que mensualmente reciben sus días de descanso y al ir a la altura de la calle del Cerro de las Campanas de la Colonia Bosques del Sur.
Los integrantes del comando armado empezaron a dispararles, irrumpiendo la tranquilidad de los habitantes de la zona sur de la ciudad, los que fueron sorprendidos en las calles, tiendas comerciales y reuniones sociales, los que como pudieron buscaron refugio o se tiraron al suelo para no ser alcanzado por una bala perdida.
Un juez de Control Adscrito al Centro de Justicia Penal Federal, con sede en el Reclusorio Norte de la Ciudad de México, vinculó a proceso al otrora Secretario de Economía, Ildefonso Guajardo Villarreal. En el sexenio del 2012 al 2018, por su probable responsabilidad en el delito de enriquecimiento ilícito. Esto es en gobierno del Presidente de Enrique Peña Nieto.
El Juez de Control dictó también como medidas cautelares la firma periódica y la prohibición de abandonar el país sin autorización judicial. Se concedió a la FGR un plazo de 4 meses para el cierre de la investigación complementaria.
Ahora resulta que, en Laredo, Texas, hay gente que no le hace el feo al dinero de la estructura que desde Centroamérica mueve a migrantes que sueñan con cruzar a Estados Unidos, en busca de una mejor suerte para todos sus familiares, invasión contra la que supuestamente están luchando los gobiernos de México y Estados Unidos.
Esa gente de la que hablamos como que quiere ayudarlos, ya que a los cabecillas les renta viviendas que convierten de la noche a la mañana, en lo que llaman “casas de seguridad”, en las que en las últimas 24 horas los agentes de la Patrulla Fronteriza (Border Patrol) del Sector Laredo y los socios de las fuerzas del orden arrestaron en esos “escondites” a más de 70 personas indocumentadas en todo Laredo, de las que confirmaron que 40 proceden de México, Guatemala, Honduras y El Salvador.