Columnas

“¡SE PESCÓ UN TIBURÓN!”

LOS PUNTOS SOBRE LAS…

POR ÁNGEL VIRGEN ALVARADO

Aquel día, antes de las 5 de la mañana, SIGIFREDO SÁNEZ, un corpulento mecánico que medía casi 1.90 metros, junto con sus cuatro compañeros llego a la playa Bagdad para participar en un torneo de pesca.
Era el verano de, hace ya, un mundo de años.

El sol, que en estas latitudes despunta por el este, todavía no aparecía.
SIGI, como le decían, junto con sus amigos se dirigieron hacia el lado sur de la playa, estacionaron las camionetas con el frente hacia Matamoros y bajaron sus hieleras.

Con palas hicieron un gran montículo de arena, la mojaron con agua del mar, pusieron más arena seca arriba y encima prendieron carbón.
Enseguida colocaron unos block de cemento y una parrilla.

Cuando el fuego estuvo a punto, en sartenes cocinaron huevos a la mexicana y calentaron tortillas.
A las seis de la mañana empezó el torneo.
“Yo traía una caña grande con un gran molote de sedal de 60 libras -dijo SIGI- Entre al mar, pasé el primer “reventadero de olas”, luego el segundo y cuando el agua me llegaba a la cintura, lancé la plomada.
Llegué a la orilla de la playa, enterré un portacañas y allí puse la caña de pescar.
Dieron las 7, las 8 y las 9 de la mañana. Mis amigos están sacando corvinas pequeñas y medianas. Gatos, tamborcitos, sargos, caballitos, pero nada grande.

“¡Ya saca la caña de allí, SIGI!”- me gritaban pero ni caso hacía.
Iban a dar las 10 de la mañana cuando oí: “¡SIGUI, la caña!”
La caña estaba totalmente doblada hacia el mar. Traté de sacarla del portacañas pero no pude. Entonces saqué el portacañas y afloje el sedal de la caña para que corriera.

Como traía mucho “hilo”, casi medio minuto estuvo “corriendo” hasta que oí que dijeron:
“¡Se pescó un tiburón!”
Desde las 10 de la mañana comencé a luchar con el gran pez.
Dieron las 11, las 12 del mediodía, la una de la tarde, las dos…

Mis amigos solo me daban agua o refrescos, pero, en torneo, si te ayudan, te descalifican.
La gente se juntaba para ver la lucha del pescador contra el tiburón.
SIGRIFREDO batalló con el gran pez, por más tiempo. Recortando sedal lo trayéndolo hacia la playa.
Casi a las cinco de la tarde el tiburón ya estaba a unos metros de la orilla cuando ¡saz! Se rompió el sedal.
Como un loco, corrió hacia el agua dando manotazos buscando el sedal y lo halló.
Poco a poco y dando vuelta sobre sí mismo, se enrolló el sedal sobre su traje de baño y comenzó a caminar hacia atrás, hacia la playa.

Cuando el tiburón encalló, un juez, con un bate, fue y lo golpeó en la nariz y lo mató.
Lo subieron a la caja corta de una camioneta y gran parte de la cola del tiburón quedaba de fuera.
SIGI ganó el primer lugar en especies varias.
Quise escribir esto porque este domingo será el 3er Torneo de Pesca en el puerto EL MEZQUITAL, en familia.
Habrá más de 400 mil pesos en premios y la rifa de una camioneta Cherokee.
De todas partes del estado están llegando pescadores, gente que se apasiona por este deporte sano, singular.
Mañana sábado habrá un gran baile desde las siete de la tarde.
Después del torneo del domingo (6 de la mañana a las 2 de la tarde) a las cinco de la tarde habrá carreras 4 por 4 (OFF ROAD).

Si desea más informes del evento, puede hablar al 868 135 5468.
¡Saludos a todos los pescadores!
Por hoy, es todo.