Será 2023 año complicado para la IP: Esperan nuevo sexenio

*La llegada de un nuevo sexenio, dicen, atraerá a grandes inversionistas que buscan certidumbre y confianza para aterrizar grandes proyectos

María de Jesús Cortez

Las grandes inversiones podrían llegar al país, pero hasta el 2024 ya pasadas las elecciones pues esos sectores siempre esperan al nuevo gobierno para que les dé certidumbre y estabilidad, mientras tanto en el país seguirá la carestía, las altas tasas de inflación y de interés que frena a los sectores productivos que ya están trabajando.

Así lo declaró el ex presidente del Consejo de Instituciones Empresariales del Sur de Tamaulipas, CIEST al hablar del panorama que ven para el año que está por iniciar, el 2023.

«Se prevé, como siempre, años difíciles ya cada año representa nuevos retos. Hoy en día seguimos teniendo la afectación de las altas tasas de inflación, las mismas altas tasas de interés que se tienen para contener la inflación por un lado y contener la inversión por otro lado afecta también el crecimiento en los negocios. Hoy en día hablamos más que de crecer de mantenerse, hay algunos negocios que han visto afectada su economía de la pandemia para acá y han cerrado, lamentablemente la mayoría son empresarios locales y hemos visto que llegan sustituciones por empresarios de otros estados básicamente y con inversiones hasta extranjeras pero seguimos viendo desabastos en materias primas seguimos viendo una carestía, entonces para el sector empresarial, para el pequeño y mediano empresario especialmente es muy complicado», indicó.

Y es que Manzur Manzur hizo ver que no hay apoyo para estos sectores, el pequeño y mediano que por cierto son los que generan más empleos.

«Las tasas de interés son muy altas hay escasez de materia prima y eso ocasiona carestía. Por otro lado, los aumentos a salarios y las prestaciones que van inherentes como el Impuesto de Nómina, Seguro Social, Infonavit, son una carga adicional que tiene el empresariado», aseveró.

El empresario del ramo de ropa recalcó que también ha habido cambios en materia de Hacienda que les ha «pegado».

«El cambio al régimen simplificado sobre todo para las sociedades anónimas que no rebasan los 35 millones de pesos -es una gran parte- fue sumamente afectada con esta modificación porque ni simplificado ni más económico, hoy en día se está pagando el doble de impuestos de lo que se pagaba con el régimen federal lo que también afecta la liquidez de las empresas y eso es para mantenerse y mucho menos ahorita pensar en crecer y eso conlleva a pensar que el crecimiento de empleo para el otro año estará muy moderado», enfatizó.

Eduardo Manzur advirtió que el 2023 será un año que inicie con poco del problema internacional de la guerra que no cesa, la carestía en materias primas, combustible, el tema de pandemia que aún no está superado a nivel mundial y que sigue afectando el abasto de materias primas a nivel general -hoy la mayoría viene de Asia- y mientras eso siga estando afectado los sectores productivos no se han podido normalizar ni aprovechar las oportunidades que eso les da de generar empresas que sustituyan lo que ellos fabrican para los mexicanos abastecerse o abastecer el mercado mundial.

«Vemos que el sector automotriz sigue sin regularizarse, hay filas de espera de entre 4 y 8 meses para adquirir un vehículo lo que no pasaba y que habla de que la cadena de ese sector se ha visto afectada y así otros sectores como el textil donde hay escasez de materia prima para este sector, hay fabricantes nacionales afectados por desgracia seguimos recurriendo a la importación que siempre se ha dicho que no es lo mejor para el país tenemos que buscar hacer ese cambio de país comercializador a productor y eso sería tener una política industrial que hoy no tenemos ni vemos cerca que la vayamos a tener por eso las afectaciones siempre serán mayores cuando se depende del extranjero ya que son muchas vertientes de las que está colgada con hilos la economía no sólo lo que pasa a nivel nacional sino lo que pasa en el mundo», detalló.

Por tanto, dijo que se verá un inicio de año con carestía escasez de productos y con dificultades para la inversión porque precisamente no hay una política que esté incentivando las nuevas inversiones sino que sólo los grandes corporativos tendrán en su plan de trabajo tener mayor posicionamiento «pero vemos que también será algo moderado porque nos acercamos a final de sexenio y la mayoría de los grandes capitales buscan esa certidumbre y estabilidad que les da el nuevo gobierno, se prevé que las grandes inversiones al país puedan venir después del 24 pasando la elección presidencial».