Terremotos llegan cuando llegan
Gaceta.
Por: Raúl Terrazas Barraza
Terremotos llegan cuando llegan
En días previos al 19 de septiembre de 2023, se mantuvo en la opinión pública la idea de que, en la ciudad de México y el Centro del país, podría registrarse un movimiento telúrico que generara graves daños a las poblaciones.
Pero, ese pensamiento se desvanecía ante el hecho de que los terremotos son fenómenos naturales que no se pueden predecir, de forma simple se presentan y generan destrucción, misma que afecta a miles de personas.
El asunto es que la coincidencia de que, en tres ocasiones en los últimos 38 años, el 19 de septiembre se hayan registrado los tres sismos de magnitud mayor a siete, hace propicio que esta fecha llegue a considerarse como maldita porque atrae los terremotos.
El peor de los tres fue en 1985, hace 38 años, después el del 2017, es decir, hace seis años y con una diferencia de tiempo entre ambos de 32 años, en tanto que, el último fue el 2022 pero, de escasa magnitud y con cinco años de diferencia del anterior, de manera que, no puede establecerse un patrón.
Frente a ello, la afirmación de que no pueden predecirse, se comprueba y solo queda indicar que en este 2023, no hubo terremoto, aunque sí tembló, porque hay datos en el sentido de que, fue un movimiento de cuatro grados, si se quiere decir, apenas perceptible en algunas partes, pero, nada que ver con temores, creencias o apreciaciones debido a que, el 19 de septiembre es un día difícil para la población del centro de la República Mexicana.
El origen de los terremotos está el choque y deslizamiento de las palcas tectónicas, que dan lugar a energía de fricción, misma que se convierte en la causa de los sismos y aunque los científicos tratan de relacionarlas con asuntos relativos al ambiente y a factores geológicos.
La realidad es que, hay una identificación precisa de las regiones que son propicias para los movimientos telúricos y en función de ello se han creado herramientas como la alarma sísmica para que las personas se retiren de los sitios de riesgo.
A propósito de este tema, en las últimas dos décadas se han identificado movimientos sísmicos en regiones que, ni siquiera tienen registros que puedan preocupar a la población, como es el caso de Tamaulipas, en dónde se han identificado sismos de muy baja escala o apenas percibidos, que dan una idea del impacto que tiene el movimiento de las placas teutónicas en los continentes.
El 19 de septiembre de 2023, fue entonces una fecha para recordar momentos difíciles que ha tocado vivir a los habitantes de las entidad ubicadas en la zona de influencia de los movimientos de la tierra a partir del desplazamiento de las placas ya referidas.
Hace 38 años, quizá una docena de victorenses estuvieron en la ciudad de México hasta antes de las siete de la mañana de aquel 19 de septiembre, entre ellos el siempre bien recordado Don Carlos Diez Gutiérrez Coleman, quien había asistido en su calidad de dirigente de los Ganaderos de Tamaulipas a una reunión de la Confederación Nacional y se había hospedado en el Hotel Regis en el Centro de la capital del país, que fue uno de los que se cayeron con el terremoto y en el cual murieron muchas personas.
En aquel tiempo el vuelo para estar de nuevo en Ciudad Victoria, salía de la ciudad de México antes alrededor de las seis de la mañana, por eso, personas como Don Carlos que dejaron la capital del país antes de las siete de la mañana se dieron cuenta del terremoto cuando ya estaban en esta capital y jamás salieron de su sorpresa, porque poquito tiempo antes ellos estuvieron en la zona donde todo era escombros por la gran cantidad de edificios que cedieron al embate del efecto trepidatorio del sismo.
Era la época en la cual, el mejor medio de comunicación además del teléfono, eran los faxes y telefaxes, a través de los cuales se podía pedir información, dado que, las redes telefónicas o no tenían servicio o estaban abarrotadas de llamadas y las personas del interior del país de manera afanosa buscaban información que les permitiera tener noticias de sus conocidos en la capital del país
Desde algunas Instituciones o agencias de noticias que contaban con tecnología avanzada, se logró contactar a decenas de personas y desde la oficia del periodista Víctor Manuel Calzado Mendiola, se atendieron solicitudes de varias decenas de personas tras darse cuenta de que allí se contaba con telefaxes para tratar de enlazar a familiares.
Fue de gran impacto para los habitantes de todo el país mostrado por las cadenas de televisión que transmitían en vivo los efectos del devastador terremoto, el peor de los registrados en 19 de septiembre y que, como el dos de octubre, aunque por otra causa, tampoco se olvida.
