Columnas

«TITULO 42 Y EL NUEVO CAOS MIGRATORIO».

Por: Dr. Jorge A. Lera Mejía
Cómo ha trascendido entre los transmigrantes extranjeros en su trayecto por México hacia la frontera norte de EEUU, y también, entre los propios emigrantes mexicanos, que igualmente buscan el mal llamado «Sueño Americano», éste miércoles 21 por órdenes de un juez norteamericano, se eliminaría el conocido como «Titulo 42,» que ha permitido a las autoridades migratorias de Estados Unidos deportar en forma «Fast Track» a los migrantes ilegales que cruzan la frontera, bajo pretexto de ampliarse y contaminarse la Pandemia del Covid-19.
Sin embargo ayer martes, la Suprema Corte de Justicia de Estados Unidos, decidió congelar nuevamente el fin del Título 42, previsto para este miércoles 21, la mencionada norma que seguirá permitiendo, al menos hasta el próximo 27 de diciembre, la expulsión de la mayoría de migrantes que llegan a la frontera con México. Lo anterior, en respuesta a una demanda interpuesta por 19 estados conservadores Republicanos, de los 50 estados del país.
La petición había sido presentada urgentemente por esos 19 estados, argumentando que el levantamiento del Título 42, previsto para este miércoles 21 de diciembre, iba a provocar “un daño masivo e irreparable a los estados, en particular a los que soportan las consecuencias de la migración irregular”. Siendo el más rebelde, el propio gobernador Republicano reelecto de Texas, Greg Abbott.
El gobierno federal demócrata de Joe Biden, se opuso a la apelación de la citada Suprema Corte, e informó ayer martes al Tribunal, que ha destinado más recursos a la frontera sur en preparación para el fin del Título 42. Esto incluye más coordinadores de procesamiento de la Patrulla Fronteriza, un reforzamiento de la vigilancia y más seguridad en los puertos de entrada, de acuerdo con al propio gobierno de Biden. Sin embargo, Biden solicitó aplazar ésta medida, hasta el próximo 27 de diciembre, por lo que de hecho en la práctica, seguirán deportando Fast Track a los migrantes de otros países y de México, que ahora se encuentran hacinados a lo largo y ancho de los seis estados fronterizos del norte de México.
Las restricciones de Título 42 aplican a todas las nacionalidades, pero se han ejercido en mayor medida a los migrantes de países a los que México acepta recibir tras ser expulsados por Estados Unidos: Guatemala, Honduras, El Salvador, y más recientemente Venezuela, Cuba y Nicaragua, además de México. A los haitianos les dan un trato más conciliador.
Cifras conservadoras, calculan que entre Tijuana y Mexicali, Baja California, se ubican cerca de 10 mil personas, entre mujeres, niños, hombres adultos mayores, familias enteras, entre los cuáles trasciende muchos son «niños menores no acompañados» (NMNA). Baja California hace frontera con el estado democráta de California EEUU.
En lo concerniente al estado de Sonora, se calculan otros 5 mil migrantes acampando o en casas de migrantes en Nogales y otras ciudades fronterizas de dicho estado. Sonora hace frontera, con el estado democráta de Arizona EEUU.
En Ciudad Juárez Chihuahua, cifras externadas por las propias autoridades de EEUU, estiman que se encuentran más de 20 mil transmigrantes extranjeros y emigrantes mexicanos, la mayoría hacinados en forma insalubre en la línea del río Bravo, que ahora registra muy bajo nivel de agua. Ciudad Juárez hace frontera con el Paso, del estado Republicano de Texas.
En el caso de Coahuila, la mayor parte de las 2 mil personas estimadas, se ubican en Piedras Negras cerca de Del Río Texas. Del Río pertenece al estado Republicano de Texas.
Nuevo León, registra entre Monterrey y el Puente Columbia, otras 3 mil personas. Columbia se ubica cerca de Laredo Texas.
Siendo Tamaulipas, el estado que más migración forzada registra, la mayoría compuesta por cerca de 12 mil personas estimadas en la ciudad de Reynosa, 8 mil en campamentos y en la rivera del Río Bravo en Matamoros, y otros 2 mil en la ciudad fronteriza de Nuevo Laredo. Reynosa hace frontera con McAllen Texas, Matamoros con Brownsville Texas y Nuevo Laredo con Laredo Texas.
Estás cifras, no toman en cuenta los transmigrantes que reconoce el Instituto Nacional de Migración (INAMI), que ahora mismo están en tránsito hacia los seis estados fronterizos citados, desde la frontera sur de Chiapas, Tabasco y Oaxaca, que serían otras 25 mil personas que se encuentran esperanzadas que las autoridades migratorias norteamericanas les darían asilo humanitario o politico, por la creencia que el democráta Joe Biden eliminaría el citado Título 42.

Lo más seguro, es que con o sin Título 42, las presiones de los Estados conservadores norteamericanos seguirán dificultando la entrada legal o ilegal a los EEUU, más al trascender las anteriores cifras de migrantes estimadas, que totalizan 62 mil transmigrantes extranjeros y emigrantes mexicanos. Más los 25 mil que ahora transitan hacia los seis estados citados.

Ésta es una verdadera crisis Migratoria, es un caos ante los intensos fríos que ahora se están presentando en la frontera norte, además que los recursos humanos y materiales que disponen los seis estados y las ciudades fronterizas méxicanas, no son suficientes para atender las grandes filas de migrantes hacinados en carpas, tiendas de campaña, casas de migrantes y en las calles y riveras del río Bravo o río Grande de Texas y México…