Universidad acreditada en 2020.
Gaceta.
Por: Raúl Terrazas Barraza.
Universidad acreditada en 2020.
Siempre que el Rector de la Universidad Autónoma de Tamaulipas acuerda y analiza cada asunto que compete a las Unidades Académicas, reuniéndose con los Directores, fortalece su condición de líder universitario y genera sinergias que tienen que ver con el crecimiento académico de la Institución.
Esto sucedió de nuevo en la zona sur de la entidad, donde el ingeniero José Andrés Suárez Fernández, estuvo con los Directores de las Unidades Académicas y en dónde, a varios de ellos entregó acreditaciones alcanzadas en los programas educativas con los que preparan a los jóvenes de Tamaulipas para que sean productivos y colaboren al crecimiento de la entidad en todos los órdenes.
Fue la onceava sesión del Colegio de Directores, en la que, se dio un gran espacio a los trabajos de acreditación en los que están involucrados directivos, maestros y alumnos, porque no se trata solo de acomodar las cosas para presentar mejores alternativas a los estudiantes de la entidad, sino que, se crea una condición para la certificación, al grado de considerarse como toda una cultura que requiere la colaboración de todos.
A la reunión del Rector con los Directores acudió el Director General del Consejo para la Acreditación de la Educación Superior, Alejandro Miranda Ayala, quien, acude con entusiasmo a Tamaulipas, porque la dedicación de la comunidad escolar de las Facultades, genera documentos que tienen que ser entregados a quienes echaron todas las ganas del mundo para lograr un escalón más en ese asunto de la calidad educativa.
Incluso, hay quienes dicen que la acreditación de los programas educativos vuelve a las personas esclavas de su actividad y, quizá haya razón en ello, porque una acreditación obliga al sostenimiento con el paso de un tiempo y después, ya cuándo se logró avanzar en la calidad, se encuentran con que otro proceso tienen que entrar a la acreditación o la certificación de manera que, con la experiencia lograda y la capacidad de organización de personal directivo y académico, se adquieren más compromisos.
Obvio, esto es bueno, porque la Universidad Autónoma de Tamaulipas tendrá desde un mejor nivel académico hasta el de entrar a la competitividad con otras instituciones del país.
Bajo esta premisa, el Rector Suárez Fernández, comentó que el tema de la calidad es cotidiano en la UAT, aunque el esfuerzo de los directivos, docentes y alumnos no busca solo demostrar que la existe, más bien debe de impactar en la competitividad profesional de los egresados, ya que, desde su etapa de estudiantes tuvieron una educación acreditada para que se conviertan en excelentes profesionistas y buenos ciudadanos.
En la UAT, el 84 por ciento de los más de 40 mil estudiantes que tiene, estudian ya en un programa acreditado y de calidad.
Ante los Directores de las Unidades Académicas anunció que este 2020, la Rectoría quiere que la totalidad de los programas estén acreditados, factor que tiene que ver con inversión y desde luego con la incorporación de más funcionarios y académicos para cumplir con cada requisito necesario para la acreditación.
Ahora bien, si es inversión, lógico que implicará el cumplimiento al cien del adecuado uso de los recursos autorizados para la Universidad, para que todas las áreas incluida la de acreditación cuenten con el apoyo presupuestal requerido. El Rector tendrá que alcanzar la eficacia en todos los rubros, para que el presupuesto alcance.
Los otros.
Ya quedó, los trabajadores de la educación de Tamaulipas agrupados en la Sección 30 del SNTE, terminaron la consulta sobre las necesidades que serán propuestas al comité nacional, para que se arme el pliego petitorio que pondrán en la mesa de negociaciones con la SEP y la Secretaria de Hacienda y Crédito Público, para que, antes del Día del Maestro de este año, haya una respuesta favorable.
De acuerdo al reporte del secretario general seccional, profesor Rigoberto Guevara Vázquez, los maestros de Tamaulipas quieren que la Federación respalde su petición de fortalecer el salario, la revalorización laboral y un incremento que valga la pena en la seguridad social.
Todos los documentos generados en la consulta a la base sindical para armar las propuestas de negociación con la SEP, fueron enviadas ya al comité nacional. Se trata de más de 43 mil encuestas que podrán ser revisadas en el comité nacional y sumarlas a las que llegarán de todos los rincones del país, porque los profesores tienen grandes necesidades y decidieron hacer algo para que, de una vez por todas los salarios sean congruentes con la entrega y el trabaja que tienen los profesores frente a grupo y en las escuelas de todo el país.
El Censo General de Población y vivienda ya está a la vuelta de la esquina, será el mes que viene y el INEGI tiene que acelerar el paso para llagar franco al día de arranque de esa acción que corresponde al año 2020.
Este tipo de actividad que permite recabar información sobre la población, su forma de vida y la estructura de su sociedad, se lleva a cabo cada 10 años, por tanto, es el tercer censo del siglo XXI y se supone que la gran diferencia con los dos pasados, es que, se usará lo último en tecnología para que los encuestadores puedan hacer con más calidad su trabajo y que, el análisis de la información, supere las expectativas de la minuciosidad ya que, las computadoras y los paquetes modernos facilitarán las cosas para entregar en menos tiempo los resultados a los mexicanos.
Esto de instituciones educativas y de maestros, da pie para señalar que febrero es el mes de las preinscripciones para todos los niveles de educación básica y que, el titular del área, Mario Gómez Monroy, ya comprometió con los padres de familia que nadie se quedará si un lugar en las escuelas de la entidad.
Obvio, esto no fue suficiente para que quienes buscan un sitio para sus hijos como alumnos de nuevo ingreso a los niveles educativos, dejasen de acudir a las escuelas para hacer cola y hacerse del documento que garantiza la preinscripción y por tanto un espacio para el ciclo escolar venidero.
El calendario educativo del país marca febrero como el mes de las preinscripciones e inscripciones y para ello, los padres de familia tienen prisa y no desistirán ante nada para lograrlo.
