150 años de cárcel para mujeres que privaron de la vida a Rosa Angélica y sus hijos
Por Diana Alvarado
La Fiscalía General de Justicia en el Estado de Tamaulipas dictó como sentencia contra Diana Alicia «C» y Wendy Yaneth «M» por el delito de Homicidio Calificado contra Rosa Angélica y sus dos hijos, sucedido en Altamira, fraccionamiento Haciendas.
El Agente del Ministerio Público acreditó la responsabilidad de ambas mujeres, por el delito ocurrido el 10 de marzo del año 2021 en el fraccionamiento Haciendas II, del municipio de Altamira.
Se obtuvieron las pruebas necesarias para comprobar que mediante un arma blanca que privaron de la vida a la víctima y a sus dos menores hijos.
Es como la Fiscalía General de Justicia del Estado de Tamaulipas refrenda su compromiso de utilizar las herramientas jurídicas a su alcance para no dejar impunes los delitos que atentan contra la vida de los tamaulipecos.
Por lo que también se estableció el pago de 398 mil, 986.80 pesos, por concepto de la reparación del daño.
🔘Lamentablemente sucedió en Altamira:
Fue el 13 de marzo del 2021 cuando Rosa Angélica convivía con Diana Alicia y Wendy, al calor de las copas, comenzaron a pelear presuntamente por celos, la pelea llegó a golpes y pérdida en el alcohol Diana Alicia sacó un cuchillo con el que la apuñaló en repetidas ocasiones a R. Angélica harta privarla de la vida.
También en su declaración fueron encontradas y detenidas en Las Choapas a Wendy y Diana Alicia, quienes informaron que estuvieron tomando cerveza Rosa Angélica de 25 años en su domicilio ubicado en calle Navarra, entre Lisboa y Almería del citado complejo habitacional.
Posterior a la pelea, Angélica quedó tendida en un charco de sangre, por lo que Diana y Wendy empezaron a limpiar la escena y arrastraron el cuerpo sin vida de Rosa hasta su cama.
Tras los ruidos que hacían, los niños Alexis de 8 años se despertó y salió de su cuarto, por lo que al verse descubiertas Wendy le quitó la vida con dos puñaladas en cuello y espalda, mientras que la más pequeña trató de huir pero desafortunadamente también fue privada de su vida.
Asimismo, entre ambas mujeres Diana y Wendy cargaron los cuerpos de los pequeños y los dejaron en la cama con su mamá, donde días después serían descubiertos en estado de descomposición.
Las ahora sentenciadas, huyeron rumbo a Coatzacoalcos y se bajaron del autobús en Cosoloacaque, en donde través del GPS buscaron una casa abandonada en la colonia Los Mangos, y mediante redes sociales ubicaron al cerrajero William Gabriel, a quien le pagaron con un teléfono celular que le robaron a la difunta por su trabajo de cerrajería para abrirles la vivienda.
Motivo por el cual, fue detenido Gabriel y depositado en el CEDES Altamira, hasta que de aclaró que solamente había prestado sus servicios, siendo que, a su vez, las mujeres mencionaron que viajaron a Las Choapas de donde Wendy es originaria y se quedaron a vivir en casa de una tía en la colonia Tancochapa, hasta que fueron detenidas.
Confesaron su crimen las féminas y se comprueba la inocencia del cerrajero William Gabriel.
