ColumnasEspeciales

ALCALDIAS AZULES, DE PECHITO ANTE AUDITORIA SUPERIOR

CUADRANTE POLITICO

POR FERNANDO ACUÑA PIÑEIRO

ALCALDIAS AZULES, DE PECHITO ANTE AUDITORIA SUPERIOR

El pasado lunes seis de mayo, desde el Congreso local, se dejó escuchar la advertencia de que, las cuentas públicas del ejercicio fiscal 2021, serán reabiertas.

Al parecer el ex auditor carnal del panismo, Jorge Espino Ascanio les dio carta abierta de impunidad a las alcaldías panistas y otras dependencias donde hay rastros de corrupción cabecista.

Este grupo de auditores que acompañaron a Espino Ascanio en su aventura de disimulos y complicidades, serán llamados a cuentas. Todos ellos deberán explicar los motivos por los cuales evadieron su responsabilidad como funcionarios encargados de fiscalizar el ejercicio del gasto público.

De acuerdo a lo que acaba de declarar la Presidenta de la Junta de Gobierno, Úrsula Salazar Mojica, tras detectarse deficiencias en el proceso de fiscalización, se procederá a revisar de nuevo, esos presupuestos ejercidos. Y esta vez no habrá manera de que, los responsables de las corruptelas evadan la ley.

Será el auditor interino Francisco Antonio Noriega Orozco el que se encargue de enderezar el entuerto de los auditores a modo que se hicieron de la vista gorda. En esta ocasión, se anuncia, todo se llevará a cabo conforme al artículo 13 de la Ley de Fiscalización y Rendición de Cuentas de Tamaulipas.

La medida de carácter técnico-contable, se inserta también en la estrategia de carácter político, a sabiendas de que, muchos de los alcaldes panistas que hoy siguen fieles al Truco-CV y compañía, traen una cola muy larga, en materia de dispendios y corrupción.

De manera que los ediles azules que un día se creyeron protegidos en su impunidad por los funcionarios transexenales sembrados por el gobierno cabecista, hoy están ante la disyuntiva de devolver la lana que se gastaron. O enfrentar el peso de la ley.

El hacha de la transparencia pende sobre las cabezas de todas las administraciones municipales, beneficiadas con las omisiones de Espino Ascanio y compañía.

Y es que el ex auditor que vivía como mago en una oficina a todo lujo, se pasó por el arco del triunfo, sus obligaciones fiscalizadoras. Tanto en lo que se refiere a las reglas presupuestarias, como en lo inherente a la contratación de deuda pública.

Durante el oscuro ejercicio de Espino, la Ley de

Disciplina Financiera de las Entidades Federativas y los municipios,  no fue ejercida

cabalmente. No se respetó.

Ya existen datos al respecto:

El Presidente de la Comisión de fiscalización, el diputado Jesús Suárez Mata, acaba de dar a conocer

que de los 159 expedientes revisados nuevamente por el auditor Noriega Orozco, se detectaron lagunas de incumplimiento al artículo 13, sobre el que recae

la rendición de cuentas.

Espino Ascanio dejó hacer y dejó pasar la presunta corrupción de los municipios azules

que son la mayoría en el estado.

¿Qué es lo que sigue ahora?

Deberán abrirse y volverse a

revisar todas esas cuentas públicas. Y de detectarse irregularidades, que es lo más seguro, se procederá contra los responsables.

-GATTAS TRAE MUY VAPULEADO A ALMARAZ EN LAS ENCUESTAS—-

En medio del calorón de un verano adelantado, las encuestas de percepción ciudadana en torno a los candidatos representan los ecos de una guerra por el poder, donde el morenismo está apabullando al PRIAN. Aquí en la capital las dos más recientes mediciones de Arias Consultores y de Poligrama , dan la ventaja al alcalde con licencia Eduardo Gattas Báez, sobre el cabecista Almaraz.

Es tan evidente el derrumbe almaracista que, el tema ha caído a los niveles del pitorreo, y los memes se han dejado sentir, haciendo escarnio de un Oscar Almaraz que ya no quiere queso, sino salir de la ratonera. Gentes cercanas al traidor del geñismo, comentan que si por él fuera, no se habría metido en esta aventura donde prácticamente está dando al traste con su carrera política. Pero su patrón Cabeza de Vaca lo sigue presionando, para que siga aguantando los golpes derivados de su triste circunstancia en una capital tamaulipeca, donde la gente ya ubica a Oscar como el ladrón que tuvo la osadía de regresar al lugar donde cometió sus hurtos.