Américo sigue en la CDMX
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Por Oscar Contreras
Américo sigue en la CDMX
Las gestiones que el gobernador Américo Villarreal Anaya realiza en la Ciudad de México ante funcionarios federales, se han pospuesto hasta el 2025 para cuando estos funcionarios públicos ya no estén en el cargo y, por lo tanto, con el debido respeto que se merece, su esfuerzo es un fracaso.
Y es que el presidente Andrés Manuel López Obrador protector, guía y gurú, del tamaulipeco, ya se gastó el dinero del 2023 y 2024 en sus obras prioritarias y sigue buscando más recursos para terminarlas, porque la elección federal le quitará un gran parte de ese dinero que necesita.
AMLO sabe que debe hacerlo y no importa que Claudia Sheiumban gane la elección, porque sería para su gobierno un error financiero invertir más en el tren, la refinería y el aeropuerto, cuando conoce que esas obras son un capricho del presidente y han costado tres veces más de lo planeado.
De tal manera que las obras de López Obrador quedarían pendientes de terminar y sí Xóchitl gana, por supuesto que no invertirá ni un peso en esas obras y es casi seguro que ordene una auditoría para que los mexicanos conozcan cómo aplicó el dinero, porque su costo final es irracional, injusto y detuvo el desarrollo en estados como en Tamaulipas.
Así que mientras esto sucede, Américo Villarreal Anaya se la pasa en la Ciudad de México porque sabe que algo tiene que presentarles a los tamaulipecos, ya que el proceso electoral sigue su marcha y sabe que eso influirá para que MORENA gane o sea derrotada.
Aunque todo indica que en Palacio Nacional le han sugerido que dé a conocer los proyectos que pudiera realizar en el futuro y que los presente como si fuera un hecho real y aunque ya nadie le cree, sigue presentando proyectos irrealizables como:
El instaurar dos líneas de un Metro-Bus que circularía de Reynosa a Río Bravo y en la zona metropolitana de sur lo haría entre Tampico, Madero y Altamira- y no es mala idea, porque modernizaría el transporte y la movilidad de las personas sería mucho mejor.
Sin embargo, este proyecto se ve muy lejano, porque en el gobierno federal no hay dinero y se necesitan más de mil 500 millones de pesos para realizarlo y sólo sería posible de llevarlo a cabo hasta el 2025 o 2026, si es que a México le va bien con la economía y el manejo de las finanzas públicas, pero en especial, sí la presidenta, sea quien sea, lo autoriza.
Si Américo, el gobernador, desea presentar buenos resultados hay pequeñas obras que para la gente son grandes obras como mejorar la infraestructura urbana: pavimentación, bacheo, iluminación de avenidas, calles, entradas a las ciudades y municipios mágicos del estado.
Otras pequeñas grandes obras que mejorarían la vida de los ciudadanos en la entidad son la limpieza urbana, la pintura en las vialidades, la renovación de la nomeclatura en los municipios, semáforos inteligentes y por supuesto que el mejoramiento del trasporte público.
De hacer todo esto, los tamaulipecos estarán más que satisfechos con el gobierno estatal, ya que solo en Nuevo Laredo, Tampico y Ciudad Madero, sus alcaldes sí las realizan, pero en la mayoría de los municipios no es así, ya que los presidentes municipales aplican su presupuesto en asuntos que consideran de más importancia.
Con este panorama las elecciones del 2024 para MORENA serán complejas y más si sus dirigentes aún siguen creyendo que los apoyos que les dan a los beneficiarios de los programas de AMLO son suficientes para hacerlos ganar.
Sin embargo, ahora es contradictorio, ya los beneficiarios se dan cuenta que el dinero que les regala el gobierno federal no les alcanza por la inflación, se vuelve polvo, ya que todo cuesta más y hasta tienen que comprar agua hasta para bañarse.
Así que para el gobierno de Américo el hacer más con menos es casi un destino sexenal, y podría empezar con reducir los gastos en los privilegios para los funcionarios, evitar los viajes a conseguir nada y en especial, reducir la nómina de los trabajadores de confianza, porque muchos de ellos solo van a perder el tiempo y por supuesto que no hacen nada. ¿Verdad?
De salida. Se continúa mencionando a Francisco García Cabeza de Vaca como un posible candidato al senado y a su hermano Ismael como diputado federal, pero en el CEN del PAN y Xóchitl misma debe conocer que los hermanos ya no le garantizan su triunfo en Tamaulipas.
La ambición, cinismo y su añoranza por el poder que tienen puede llevar al panismo al fracaso total, debido a que lo sucedido a nivel local en el sexenio de los García Cabeza de Vaca, no es lo mismo lo que a nivel nacional se ve.
Es necesario que en el Frente Amplio por México se investigue antes de definir a los candidatos al senado y a la diputación federal, sobre lo que sucedió en Tamaulipas.
¿Por qué no ganó el PAN ante Américo Villarreal Anaya si es un producto de la mercadotecnia y los panistas de Cabeza tenían tantos logros?
Es necesario que Xóchitl conozca la realidad porque no todo lo que presumen los García Cabeza de Vaca se hizo, así como ellos lo cuentan… en el PRI y en el PRD lo saben, todo es cuestión de preguntarles. Así de simple.
