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Faustino muere y MORENA estará a prueba

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Oscar Contreras

Faustino muere y MORENA estará a prueba

La repentina muerte del Senador Faustino López Vargas en un accidente carretero en Zacatecas, reactivará la política electoral, ya que el “pueblo” tamaulipeco tendrá que elegir a nuevo senador de acuerdo con la constitución.

Este inusitado proceso electoral pondrá a prueba la lealtad de los morenistas con Américo Villarreal Anaya, ya que se han visto relegados por las decisiones que su hijo ha tomado y están decepcionados con el doctor.

Y es que el hijo de Américo le ha dado prioridad a sus amigos y cómplices al ponerlos en las principales posiciones de la estructura gubernamental de tal manera que controla todo el gobierno estatal.

Así que no hay nombramiento, compra o propuesta de inversión que no sea revisada por el hijo de Américo y esto está causado molestia y decepción entre los grupos de morenistas en todos los municipios y en los políticos que se han integrado a MORENA.

Esta inusual elección pondrá prueba también la supuesta fortaleza política de MORENA y se verá si aún pueden movilizar a los más de 650 mil beneficiarios de los programas sociales del gobierno de López Obrador.

Si esto sucede así y MORENA vuelve a ganar la elección para elegir al Senador que sustituirá a Faustino López en la Cámara de Senadores, nadie, ni grupo, ni partido, organización y mucho menos algún político, tendrá nada que hacer ante el inmenso poder que tendrá el hijo de Américo.

Lo más asombroso es que sin tener ninguna representatividad más que su vínculo de sangre con el gobernador, tendrá todo el poder en Tamaulipas y si logra imponerse en lo político y en el manejo y control del gobierno, podría establecer la continuidad de su poder más allá de los seis años.

En los grupos de morenistas del estado nadie se explica porque sí el doctor Américo Villarreal Anaya no quería ser gobernador, porque aceptó a ser candidato de MORENA, porque eso de cederle el poder a su hijo es algo ilegal, inmoral y traiciona uno de los principios que más promueve el presidente Andrés Manuel López Obrador que es el de no traicionar al pueblo.

En fin, el senador Faustino López Vargas nunca imagino lo que su repentina muerte ocasionaría, pero este fatal accidente pondrá a prueba a MORENA y en especial, el poder político que el hijo de Américo tiene ahora, gracias a que su padre se lo ha cedido como si fuera un derecho divino establecido por su vínculo de sangre, como en la época de la Monarquía Europea y porque al doctor, como podemos observar no le importa ser gobernador de Tamaulipas.

De salida. Una golondrina no hace verano, dicen en mi rancho, pero el gobernador Américo Villarreal Anaya declaro que, en la primera semana del nuevo gobierno en Tamaulipas, no se registraron incidentes que perturbaran la vida cotidiana de las y los tamaulipecos.

Por lo pronto, el departamento de Estado del gobierno de los Estados Unidos recomendó a los ciudadanos norteamericanos no viajar a Colima, Guerrero, Michoacán, Sinaloa, Tamaulipas y Zacatecas, ante el alto índice de delincuencia.

Y si lo hacen recomendó que no pueden viajar entre ciudades después del anochecer, no pueden tomar taxis en la calle y deben depender de los vehículos despachados, incluidos los servicios basados ​​en aplicaciones como Uber y las paradas de taxis reguladas.

Así como también les pidió que informen a sus compañeros de viaje y familiares sobre sus planes; ser más precavido cuando viste bares, clubes nocturnos y casinos; estar atento al acudir a bancos y cajeros y no mostrar signos de riqueza como usar relojes o joyas caros.

El optimismo de Américo es válido, pero a su mandato o al de su hijo, ya no se sabe, le faltan 311 semanas y esperamos que continúe tranquilo y sobresaltos. Que así sea.