Columnas

Izquierda o derecha ¿quién sabe?

David Ed Castellanos Terán

@dect1608

Izquierda o derecha ¿quién sabe?

La trágica muerte del senador Faustino López Vargas, uno de los pocos obradoristas de cepa que tuvo Tamaulipas al servicio de la Cuarta Transformación, reavivó una dura confrontación entre grupos políticos, topón que había quedado finiquitado el pasado 5 de junio cuando Américo Villarreal Anaya ganó en las boletas la gubernatura de ese estado norteño.

“El accidente”, carretero en el que falleció el senador Faustino, se registró a cuatro meses del triunfo morenista vs César Augusto Verástegui Ostos y sus aliados, justamente una semana después de que Villarreal Anaya rindió protesta como gobernador, llegó la tragedia de López Vargas.

Si fuera por sentimientos, no debió disputarse la elección extraordinaria que se desató por la muerte de López Vargas, pero fue un asunto de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, por consiguiente, habría que salir a las calles a pedir el voto y mantener viva la disputa entre grupos políticos, además, la obligación de lidiar con una veda electoral que lejos de beneficiar a los tamaulipecos, frenó la agenda pública gubernamental, y no solo la del nuevo gobernador, sino la de los 43 alcaldes de la entidad.

Por fortuna la elección extraordinaria, apunta a tener una baja participación ciudadana, no mayor al 30 por ciento, aunque el encono, la mezquindad, el rencor y la traición acompaña a los candidatos.

Imelda San Miguel, de la Alianza PAN, PRI, PRD parece haber nadado «de perrito» en estos días, se le vio poco y su agenda siempre con horarios complicados, vivió con el fantasma de los García Cabeza de Vaca, luz y sombra del más reciente momento blanquiazul de Tamaulipas. Si gana, dirán que Cabeza de Vaca “vive”, si pierde, complicado panorama se le vaticina a los querendones del 2024.

Manuel Muñoz Cano, como Imelda, es otro junior de la política, solo que, con este, su nombre rebasa las fronteras. El candidato del Verde Ecologista, abandera la rebeldía morenista, sí, aglutina a su favor todos los enojos de quienes fueron sus aliados en la contienda a gobernador, pero sí gana, iría por la reelección en automático y le complicaría las cosas al grupo político recién llegado al poder.

José Ramón Gómez Leal, el JR, tampoco ocupa tarjeta de presentación, y como San Miguel, es vinculada a los Cabeza de Vaca, que difícil situación para “el guapo”, si nada tiene que ver con Francisco, lo carga como si él fuera el esposo, de risa. Pero si pierde, va ser costoso hasta para los tamaulipecos porque entonces ventilaría la debilidad del presente, el entretejido político sostenido en pincitas de una Cuarta Transformación de Tamaulipas.

¿Lo mejor hubiera sido declararse sin candidatos? Sabrá Dios, pero la Constitución, obligaba una elección extraordinaria, y la Constitución está para respetar y hacer valer las leyes que de ella se emanen.

Bendito Dios el 15 de febrero se guardan los aspirantes y el siguiente domingo ¡todos a votar!

En la intimidad… Yo siempre le fui a Majomes, ganamos, hasta Rihanna ProVida embarazada vestida de rojo lo sabía todo.

davidcastellanost@hotmail.com