POLÍTICATitulares

Las famosas elecciones

Por: Diana Verónica Carreón Rodríguez 

Como todos sabemos se acerca el proceso electoral, las famosas elecciones. Un mecanismo a través del cual los miembros de una comunidad eligen por votación a los representantes a cargos públicos y que su tarea será quedar al servicio de la ciudadanía. Sin embargo, hoy en día vemos como está práctica se vuelve cada día menos efectiva.

Las elecciones 2021 se realizarán el próximo 6 de junio, se espera que sean las más grandes de la historia por la cantidad de cargos que se renovaran y la participación ciudadana que se espera que acuda a las urnas. En esta ocasión, los 32 estados de México elegirán algún cargo popular por medio de su voto, entre ellos 15 gobernadores, además de la renovación de la cámara de diputados con 300 diputados de mayoría relativa (voto directo a candidatos), 200 diputados elegidos por representación proporcional. Cada partido postula una lista de candidaturas por regiones del país y se asigna en relación a los votos de cada uno. Existe mucha incertidumbre por parte de la ciudadanía en este proceso electoral, nos encontramos ante una encrucijada.

Factores como la pandemia de la covid-19, la inseguridad y la crisis económica que azota a la población, están generando el abstencionismo. Además de que cada vez se vuelven más evidentes los estragos que sufre la población ante la ola de recortes presupuestales y programas sociales por parte del gobierno federal. Y a esto le sumamos que los estados y municipios han sufrido el tiro de gracia ante las pocas participaciones que reciben, por lo que difícilmente pueden resolver demandas prioritarias de los ciudadanos, generando que la situación empeore.

Es momento que los ciudadanos participen activamente y exijan a quienes pretenden un cargo público se comprometan a considerar, analizar y resolver los problemas que plantean las comunidades, que se construyan proyectos de gobierno basados en las demandas sociales de los mexicanos. Quienes pretenden gobernarnos deben exponer su proyecto para combatir la pobreza, generar empleos, elevar salarios; nos deben explicar cuáles serán los proyectos de inversión en infraestructura y servicios básicos. Si la ciudadanía se organiza y plantea todas estas exigencias a los aspirantes esto dará como resultado una fuerza capaz de presionar a los políticos y gobernantes para que atiendan de una manera rápida y precisa las necesidades de la sociedad.

Los tiempos que nos han tocado vivir así lo exigen, debemos alzar la voz a través de nuestro voto consiente y razonado, esto nos va a permitir cambiar el rumbo equivocado en el que nos encontramos. Solo tú tienes la solución para lograr construir una sociedad más justa, más democrática y más equitativa; ya basta de políticos que solo visitan nuestros hogares y se toman fotos prometiéndonos muchos cambios para después encontrarnos con la triste realidad de que nada de eso es cierto, porque lamentablemente el pueblo es el que siempre termina pagando las malas prácticas de los políticos.

Es por todo esto que debemos organizarnos y luchar por un verdadero cambio, donde se establezca un modelo económico que genere fuentes de empleo para que todo aquel que este en edad de trabajar tenga trabajo seguro, con salarios bien remunerados que puedan cubrir los gastos básicos (alimentación, salud, educación, vivienda, recreación, etc.); reorientar el gasto social para que el gobierno construya redes de agua potable, energía eléctrica, drenaje, calles, centros de salud, hospitales, universidades, unidades deportivas y áreas de recreación en beneficio de los habitantes de las comunidades con mayor índice de pobreza extrema; se debe implementar una política fiscal progresiva, es decir, los que ganen más que paguen más impuestos y que los que ganen menos, no paguen impuestos, ya que en la actualidad pagan más impuestos los obreros y empleados.

Es momento de tomar decisiones importantes, y luchar organizados ante tanta injusticia. Las esperanzas de miles de mexicanos se han esfumado al darse cuenta que el gobierno federal  de Andrés Manuel  López  Obrador,  no es lo que se esperaba, a pesar de lo planteado en su campaña con su slogan “primero los pobres”, fue un total engaño, hoy nos damos cuenta al ver de una manera tan clara, que lejos de mejorar las condiciones de vida de la inmensa mayoría de familias pobres que hay en el país, solo empeoró, hoy más que nunca están presentes los abusos  de un gobierno federal insensible y dictador,  que solo sirve a intereses personales.

Los mexicanos ya están reconociendo el error que cometieron al votar por un discurso barato, que desafortunadamente está costando un precio muy alto. Es momento de enmendar el error y demostrar en las urnas que al pueblo no se le engaña dos veces.