Prometer y no cumplir es inhumano

Tendencias

Por Oscar Contreras

Prometer y no cumplir es inhumano

Nadie duda que el gobierno de Américo Villarreal Anaya y de su esposa es humanista, pero sus programas y acciones tienen un sentido más de justicia social y en algunas ocasiones hasta inhumanas, pero les preocupa más el manejo y control de las finanzas y las inversiones que promoverán, porque eso es lo que más deja.

Y es que si Américo fuera un gobernante humanista debió ir a Nuevo Laredo o enviar a un representante para que atendiera a las familias de los cinco jóvenes que fueron asesinados de manera inhumana por soldados del Ejército Mexicano y es fecha que todavía no lo hace.

También con el poco dinero que le dejó el pasado gobierno estatal, ya hubiera instalado un espacio con todo lo necesario para que en Nuevo Laredo, Reynosa y Matamoros los migrantes tengan mejores condiciones para vivir, ya que donde están lo hacen de manera insalubre y hasta inhumana.

De igual manera, hubiera iniciado un programa estatal de rehabilitación de escuelas primarias y secundarias o mínimo de los baños, por la inasistencia a las clases los dejaron de usar y en la mayoría de los casos, el drenaje, las llaves y sanitarios se quebraron o se los robaron.

O simplemente solucionar el abastecimiento de medicinas en los hospitales, clínicas y consultorios del sector salud, ya que al entrar al gobierno prometió, prometió y prometió que iba a cumplir y pasaron cinco meses y nunca lo hizo.

Sin embargo, después los tamaulipecos se dieron cuenta que inhumanamente había sido engañados, lo que buscaba Américo y su secretario de Salud, era hacer tiempo para firmar el convenio con el gobierno federal, pero ni así cumplen con las medicinas.

Es importante comentar que Américo Villarreal Anaya, el gobernador humanista, desde que inició su mandato prefirió comprar nuevas camionetas Suburbans y blindadas; arreglar Casa de Gobierno, su oficina en Palacio de Gobierno, en la representación de Monterrey y la Ciudad de México y revisar los aviones que le dejaron para su uso.

Igual a lo que hacían los gobernantes del pasado neoliberal con lo que nunca se vio la transformación y cambió real prometido y los privilegios de los que tanto se queja, han continuado en su gobierno.

Y claro, no lo hizo ni lo hará, porque él es más neoliberal que los priistas y panistas que se fueron, ya que ahora busca hacer negocios con el acueducto a Monterrey, en lugar de solucionar los problemas de infraestructura urbana en las ciudades de Tamaulipas.

El caso es que el gobierno de Américo está llevando a cabo acciones de justicia social más que humanistas y eso es bueno, para que los que menos tienen por fin se vean beneficiados, claro que, si es dinero federal, entonces lo que están haciendo es ampliar la estructura política de MORENA y eso sí, que es una crueldad.

Porque luego cuando lleguen las elecciones a esos beneficiarios les hablaran para que voten por los candidatos morenistas y esa acción de justicia social se convertirá en un engaño y abuso del poder y eso, hay que dejarlo muy claro.

En fin, lo más inhumano que han hecho es prometer y no cumplir cuando sabían que no habría dinero, porque lo hicieron de manera consciente y siguieron mintiéndole a la gente, igual como les pasó a cientos de morenistas que les prometieron entrar al gobierno y aún siguen afuera.

Eso de jugar con la esperanza de la gente, eso sí, que es inhumano y lo peor es que muchos de los que entraron muy pronto serán dados de baja porque ya no les conviene tenerlos. Así que no hay cambio ni transformación y como dijeron por ahí… ni llegará.