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Robos domiciliarios en las barbas de candidatos

Gaceta.

Por: Raúl Terrazas Barraza

Robos domiciliarios en las barbas de candidatos

Pareciera que el asunto de la inseguridad está fuera de la agenda de los candidatos a todos los cargos de elección popular, sin embargo, existe un nuevo modo de violencia social que tiene preocupadas a las familias tamaulipecas, el robo domiciliario que se incrementó de forma exponencial en los últimos tres meses.

En las redes sociales circulan videos en los cuales sujetos merodean por los fraccionamientos y se esconden entre vehículos o las mismas residencia para acechar las viviendas y a plena luz del día introducirse para amedrentar a las personas y robar sus bienes, sea solos en parejas y la forma silenciosa en que aparecieron se esfuman con impunidad, mientras que las víctimas de sus fechorías se quedan llenos de coraje ante la imposibilidad de evitar los atracos.

Mínimo los candidatos de todos los partidos políticos debería de reclamar la intervención de las autoridades policiales de la entidad, para contener a ola de robos, en el entendido de que, abordar este tipo de temas es solidaridad con las familias que pierden sus pertenecías por la presencia de delincuentes que actúan a sabiendas de que, habitantes de los domicilios en los que irrumpen, no tendrán manera de actuar contra ellos.

Corre una versión en el sentido de que, cada día son mas los robos a domicilios y que se trata de banda que llegaron de otras regiones del país o del extranjero, aunque también consideran que es la nueva forma de operación de la delincuencia organizadas.

El reporte de vecinos de una fraccionamiento que tiene guardia en la entrada del mismo, hace ver que en dos días más de una decena de viviendas fueron saqueadas por los ladrones y el comentario de los victorenses es de reclamos a los candidatos de todos los partidos políticos que andan en campaña para los tres tipos de cargos de elección que se disputan, alcaldes, diputados locales y federales, porque a no incorporar el tema en sus discursos y sus actividades los hace alejados de la realidad social.

A través de redes sociales, los vecinos comenzaron a organizarse para convertirse en observadores de todo aquello que despierte sospecha respecto a las personas sospechosas que se desplazan frente a cualquier domicilio y pidieron que, cuándo identifiquen una situación de riesgo acudan a la vivienda en la que se identifica un potencial ladrón, para actuar en defensa de quienes habitan en la vivienda, también señalaron la necesidad de checar el funcionamiento de las cámaras de vigilancia que pudieran existir para analizar el comportamiento de personas que se desplacen por las calles de las unidades habitacionales.

Los robos a domicilio, por su gran cantidad, preocupan a los padres de familia ante el temor de que, las cosas se salgan de control en los asaltos y puedan ocasionar daños a los integrantes de las familias, por ello, demandan que los candidatos de todos los partidos políticos se pronuncien para exigir a las autoridades de seguridad que incremente los rondines con patrullas de la policía estatal.

El problema de la seguridad pública si bien disminuyó en los últimos años, no está superado y la sociedad no está preparada ni organizada para defenderse con sus propias manos de los robos domiciliarios, ya que, no ocurren en ausencia de los habitantes de las casas, sino que, en muchos de los casos inmovilizan a las personas para cometer sus fechorías, en el entendido de que, si no les dicen dónde están las cosas de valor, pueden dañarles y son recurrentes los casos en los cuales los ladrones irrumpen en las viviendas de adultos mayores.

Si los vecinos decidieron estar vigilantes para evitar los robos domiciliarios, es lógico pensar que no es la solución a un problema que crece en todos los sectores de la ciudad y que tiene en alerta a las familias, porque los hijos están en las viviendas por el asunto de la pandemia y eso eleva el grado de vulnerabilidad.

Causa extrañeza que las propuestas de seguridad estén ausentes y quizá pueda convertirse en un factor que produzca votos para aquellos candidatos que decidan jugársela con los ciudadanos. El problema es real y de muchos casos, mismos que no se denuncia, porque la gente no quiere caer en líos con las autoridades de la Fiscalía de Justicia ni estatal ni federal, pero, si creen que la vigilancia por parte de la policía y los efectivos de las instituciones como la marina y el Ejército Mexicano debe ser más efectiva.

En las barbas de los candidatos a cargos públicos que andan en campaña se suceden los robos en muchos sectores de las ciudades y por el impacto social que tienen, debe ser uno de los temas de campaña.

Los otros.

Las autoridades electores del estado dejaron sin posibilidades de retomar la candidatura para la presidencia municipal de Soto la Marina por el partido del Trabajo y Regeneración Nacional, al exalcalde panista Habiel Medina Flores, quien se encuentra en prisión preventiva acusado de malos manejos de los recursos cuándo fue presidente municipal, por tanto, la candidatura debe llevarla el hijo de este, Luis Antonio Medina Jasso.

El Tribunal Electoral de la entidad confirmó el rechazo del IETAM, en virtud de que, el político que dejó al PAN y se fue a otro partido, podría no estar en condiciones de desempeñar el cargo sí gana las elecciones. Dicho por la gente de Soto la Marina, fue una jugada que le hicieron al popular candidato, para impedir que le gane al alcalde, Abel Gámez Cantú, que busca la reelección y no quiere que nadie le haga sombra.

Por cierto, una táctica que se había observado en ciudades de otras entidades del país y de la frontera de Tamaulipas, apareció en esta capital con anuncios de la campaña política del candidato de Regeneración Nacional, Eduardo Gattás Báez, se trata de vallas metálicas con lonas en las que aparece su foto o sus propuestas, mismas que se colocan en forma rápida, se dejan unas horas y después se retiran para cambiarlas a otro lugar del municipio de Victoria.

Hay quienes creen que se trata de una estrategia que le permita crecer en preferencias de los ciudadanos, porque todavía no logra asegurar el triunfo y de perder, sería la tercera ocasión que le suceda y, por tanto, quedar noqueado en esta actividad que, de plano no se le da.