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Sueños guajiros y etílicos de alcaldes

Opinión pública

Sueños guajiros y etílicos de alcaldes

Por Felipe Martínez Chávez

Cd. Victoria, Tamaulipas.- Vaya que han pasado por Victoria alcaldes enfermos de la cabeza (por no decir otra cosa”), o “safados” como se dice, que la ciudadanía no debe dejar entrar al pueblo ante el riesgo que representan.

En diciembre del 2009 un orate hizo aprobar lo que llamó Reglamento de Imagen Urbana de la capital, que al parecer sus colaboradores plagiaron de la vieja Europa.

Para dar una idea de las “mariguanadas” que contiene (porque sigue en vigor, aunque nunca sea aplicado por pena de los subsiguientes alcaldes), hay que recordar que, según disposiciones, las mancha urbana sería dividida en “corredores” para construir fachadas del mismo tipo y mismo color.

Así por ejemplo, según el artículo 28, las construcciones deberán tener pintura vinílica mate y prohibidos “colores brillantes o fosforescentes”, en las siguientes vialidades:

Anillo interior conformado por la calzada Luis Caballero, libramiento Portes Gil, boulevard López Mateos, Familia Rotaria, Carlos Adrián Avilés, bulevares Balboa, López Portillo y Luis Echeverría. No los hemos visto ni veremos nunca.

De otro color todos los comercios y viviendas de Boulevard Tamaulipas, José Sulaimán y Eje Vial Norte-Sur. Igual Carrera Torres, Norberto Treviño Zapata y Francisco I. Madero.

Una reverenda vacilada que, a 12 años de distancia, solo nos recuerda las locuras de ese inquilino del 17 Hidalgo (se pueden pasar incoherencias de  candidatos, pero no de autoridades).

Una tontera más de ese reglamento, es que todas las edificaciones de Victoria deben contar con área verde, es decir un jardín.

Para no abundar tanto, solo agregar que, según ese reglamento, artículo 36, todas las bardas de la ciudad necesitan contar con “vegetación trepadora (tipo hiedra) con el fin de generar un verde que mejore la imagen urbana de la ciudad”.

¿Sanciones? Hasta 300 UMAS, algo así como 27 mil pesos.

La siguiente vacilada es la que se acaba de publicar, cinco de agosto del presente en el PO Tamaulipas y que se llama Reglamento de Participación Ciudadana de la capital, un sueño guajiro de tinte azul que sus autores pensaron les daría un imperio de por lo menos 80 años en el poder.

Fue aprobado en el periodo fallido de Xicoténcatl González Uresti en septiembre del 2020, publicado casi un año después por su sucesora, luego que el respetable, en las urnas,  los hizo perder.

Bien dicen los expertos que el alcohol es mal consejero en la administración pública. En estado etílico se cometen más desatinos que aciertos.

Querían formar una maquinaria electoral que les daría el poder más allá de lo que duró el dinosaurio tricolor. La pusieron en marcha el seis de junio, antes que se publicara en el POE, pero fracasaron.

Son los comités de control político: Barrio, colonia, conjunto habitacional, fraccionamiento o ejido, que el caballerango y  la sucesora pensaron que era pan comido, como arrebatarle un dulce a un niño.

Querían ciudadanos al servicio del PAN, dirigidos desde Bienestar Social, Cultura y Deporte por Javier Mota Vázquez. Miles para promover el voto en aras del imperio que hoy sabemos no pasará más allá de los seis años.

Comités fantasmas que nunca se integrarán y menos mediante elección directa de los ciudadanos. ¿Obras? Si no realizaron ninguna en los tres años.

¿Para qué organizarlos? La gente está harta que no le hagan caso. Si no reciben a nadie en audiencia, menos propiciarán una consulta popular. Un reglamento que nació muerto, igual que el de Imagen Urbana.

Casualmente son los peores alcaldes que han pasado por Victoria.

Para dar audiencia a la gente en el edificio del 17 Hidalgo no se necesita reglamento y así lo considera el próximo edil, Eduardo Gattás Báez, quien se propone dedicar todo un día para atender directamente a los ciudadanos. Es algo que no se veía desde hace más de 20 años cuando pasó por la silla municipal Enrique Cárdena del Avellano.

¿Consulta municipal? Para que si, de acuerdo con el artículo 27 “no será vinculante” y solo podrá ser elemento para la toma de decisiones internas. Una vacilada más.

Por cierto, Gattás se trepó en la ola de unidad del Movimiento de Regeneración Nacional que buscará ganar la siguiente gubernatura del Estado. Se ha reunido con las principales figuras partidistas.

El viernes estuvo aquí Erasmo González Robledo, el maderense presidente de la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados, quien ofreció su respaldo a las peticiones de los victorenses. Sabe Gattás que ahí está la llave de los recursos para resolver el problema del agua.

Al asistir a una reunión de mujeres, Erasmo se comprometió a favorecer la unidad al interior guinda y pidió “ayúdenme a que esta unidad nos lleve a todos juntos a cumplir a los tamaulipecos que confían en sus gobernantes”.

Entre otros funcionarios federales, Lalo se ha reunido con actores como la delegada del IMSS, Velia Patricia Silva y los jefes la CFE, con quienes tendrá que platicar mucho por aquello de la deuda de Comapa que le deja Pilar Gómez y su antecesor. Aparte estuvo por Monterrey promoviendo inversiones.

Aparte, luego de disfrutar del periodo de vacaciones de verano, este lunes regresa a labores el personal administrativo de la Universidad Autónoma de Tamaulipas. Es propiamente el inicio del periodo verano-otoño que arranca con inscripciones y reinscripciones, y la semana que entra el arranque de labores académicas.