Columnas

Verano sin política.

Gaceta.

Por: Raúl Terrazas Barraza

Verano sin política.

En el comienzo del verano del 2021, que tiene pandemia, temperaturas altas extenuantes y al mismo tiempo un asomo a la posibilidad de días diferentes en cuánto a temperatura debido a la presencia de lluvias, las dificultades existen para la sociedad, ya en aquello que tiene que ver con la economía, el futuro inmediato de la educación que podría mantenerse a distancia si se toma en cuenta la evolución en negativo de los casos de contagios en la entidad.

Es verano es una estación del año deseada por la sociedad, porque se relaciona con asistencia al mar, balnearios, un estilo de vida diferente a las dos estaciones anteriores, el inverno y la primavera, incluso hasta genera un espacio para el relax, porque solo mencionar el verano traslada a las personas a las vacaciones, al descanso que muchos quieren disfrutar para recargar las piulas y estar de nuevo listos de agosto en adelante para sacarlos compromisos que le restan al año.

El varano desde una perspectiva técnica solar, es una estación que comienza entre el 20 y el 21 de junio de cada año y se produce debido a la inclinación del eje Norte-Sur de la Tierra en casi 23.5 grados hacia el sol, situación que hace variar las cantidades de luz solar y que alcancen en varias regiones del planeta mientras la tierra gira frente al sol.

En esta época, el Polo Norte se encuentra más inclinado hacia el Sol que, durante cualquier otro día del año, por tanto, en el hemisferio de este lado de la tierra sus habitantes viven el día más largo y la noche más corta del año y en el hemisferio Sur ocurre al revés, es decir, en junio es invierno y el día más corto del año se da en aquellos lares.

La lógica no falla, así que, si esa inclinación del eje de la Tierra en Verano de más de 23 grados en torno al Sol aumenta la exposición de la tierra, se tendrá más luz solar y eso implica calor, en ello está la explicación de los intensos calores que se viven y se vivirán de aquí al 15 de septiembre en regiones del país como el noreste, dónde se encuentra Tamaulipas.

Por cierto esa inclinación de la tierra sobre su eje en el verano, es la que en realidad produce temperaturas más altas y no porque la Tierra se haya acercado al Sol, esto es nada más una creencia, pero, de forma científica está comprobado que la distancia entre ambos no influye la intensidad de los calores, cosa que asevera el Astrónomo del Planetario de Chicago, Mark Hammergren, quien precisa que en realidad aquello que más incluye en las estaciones del año, es la inclinación del globo terráqueo.

Con el verano encima, el ciclo escolar a punto de terminar y la apertura en automático de mucha gente para el relax del verano, pudiera decirse que se llega a una época que le gusta a las personas, sin embargo, la contraparte que son los más, tienen cierto que el trabajo no puede reducirse, ya que la situación de la economía y los efectos negativos que la pandemia de COVID-19 ha dejado, tiene en jaque a infinidad de negocios y de empresas, por ello cobra importancia afirmaciones como la del Subsecretario de Desarrollo Económico de la entidad, Jesús Villarreal Cantú, en el sentido de que se han otorgado créditos por más de 600 millones de pesos para la recuperación económica.

En el campo la entrada del verano se asocia con la posibilidad de un cambio para bien, ya que podría generar humedad suficiente para le recuperación de los pastizales y con ello superar la difícil etapa de mortandad de ganado ante la falta de alimento y desde luego, los estragos en el establecimiento de cultivos el ciclo actual, de manera que, la humedad que pueda registrarse de aquí al 15 de agosto en que se cierra el ciclo de siempre venidero, podría pintar diferente para quienes tienen puestas las esperanzas en la producción de granos.

Por cierto, la llegada del verano es ya sin política ni políticos, algo que los ciudadanos anhelaban desde hace tiempo, en virtud de del trabajo realizado por partidos y sus candidatos para ganar las elecciones más grandes de la historia que culminaron con la votación del pasado seis de junio y cuyos resultados definitivos, se sabrán una vez que se hayan superado los medios de impugnación presentados por los actores del proceso, esto es, una vez que se haya consumado el tiempo previsto por las Leyes Electorales y cuya fecha límite para las resoluciones es el 20 de agosto venidero. Será hasta entonces cuando las asignaciones de los cargos de representación proporcional puedan llevarse a cabo y de esa manera complementar las planillas de los Ayuntamientos y la conformación del Congreso del Estado.

Por lo pronto dos semanas sin política representan tienen en descanso a la gente, aunque todavía existen en muchas regiones de la entidad, aquellos candidatos que perdieron y que no encuentran a quien echarle la culpa de los resultados adversos que tuvieron y para quienes deciden escucharles hacen largas peroratas de su percepción sobre la forma en que fueron derrotados.

Desde luego este tipo de consideraciones ya tienen lugar, porque las discrepancias que no se plasmaron en los medios de impugnación y que se encuentran en investigación por las autoridades electorales, de forma simple puede decirse que se trata de justificaciones a través de comentarios y explicaciones que nadie les pide.

Los otros.

Para todos que quieran anotarse como prospectos a las precandidaturas al Gobierno de Tamaulipas, de cualquier partido político, la sucesión del año que viene es para que haya mandatario solo por dos años, ya que, el otro mandatario de esta entidad tendrá que elegirse en el 2024, año en el cual todas las elecciones locales del estado quedan alineadas a los procesos federales, porque así lo prevé la legislación del país, tras las reformas políticas del 2014.

En Tamaulipas nadie quiere que suceda como en Baja California con la llamada Ley Bonilla, con la cual a chaleco el gobernador saliente de este año, Jaime Bonilla Valdez quería quedarse cinco años al frente de la administración. El rechazo social es cabal a Leyes, Ismael García, Gerardo Peña, Jesús Nader Nasrallah, César Verástegui, Américo Villarreal, Rodolfo González, Enrique Cárdenas, Gustavo Cárdenas, Héctor Garza, Mario López Hernández, Rigoberto Ramos, Oscar Almaraz, entre otros que ya piensan en el 2022.