Primer dolor de cabeza

Opinión pública

Primer dolor de cabeza

Por Felipe Martínez Chávez

Cd. Victoria, Tamaulipas. – Para mediados de agosto Américo y la 4T sabrán si, el non grato inquilino de Palacio de Gobierno está dispuesto a una transición tersa, o sigue con el hacha de guerra en la mano.

Se acaba el tiempo. Deberá proponer la sustitución –o continuidad- del magistrado Renán Horacio Ortiz (así se llamaba cuando recibió el nombramiento, como dice el decreto; después cambió de nombre), presidente del Poder Judicial, o pedirle un nombre al futuro Gobernador.

Hace seis años a él, a Francisco Javier, Egidio Torre le corrió la cortesía de ir acomodando a su gente cuando faltaban varias semanas para tomar los hilos del poder ¿hará lo mismo con Américo?

De todas maneras, aunque tardadito, Morena tendrá que barrer la basura que le quieren heredar.

Si el panista no tiene la intención de hacer las cosas como la urbanidad política manda, pasará por alto la invitación para que sea el Gobernador Electo el que haga la propuesta de magistrado, perfilando así a un futuro presidente del Supremo Tribunal.

Para entonces el TRIFE estará resolviendo la impugnación cabecista a reconocer a Américo como futuro jefe, si es que ese es uno de los argumentos.

Tantas facilidades le dio Torre a Cabeza que, con fecha 18 de agosto del 2016, hizo la propuesta de Renán.

El asunto lo recibió la Comisión Permanente, que no tardó tanto en citar a pleno. Una mayoría calificada de las dos terceras partes –manipulada- lo aprobó el 25, y se publicó el 14 de septiembre ¿parte de los acuerdos de complicidad para perdonarle a Egidio sus ilícitos?

Como hijo putativo de los vientos del cambio, Renán Horacio inició funciones el seis de octubre, una semana después de la llegada del gobierno panista.

Si aquel que les dije, en lugar de concertar sigue buscando pleito, será más difícil para el equipo americanista deshacerse del lastre que intentan dejarle, y con el cual no podrá gobernar.

Horacio ocupó el espacio de José Guadalupe Herrera Bustamante (lo cual es otra historia), cuyo nombramiento de seis años era el más próximo a vencer.

Advertir que solo el Gobernador –en turno- puede proponer al Congreso designación o continuación de un magistrado, pero ¿qué pasará si los diputados no aceptan el nombre? Otras vez los desencuentros, vulgo pleitos en el Legislativo.

Dice la Carta Estatal que los diputados deben resolver en los siguientes 30 días, pero, si no alcanzan las dos terceras partes de los presentes –que conste, son presentes- el Gobernador tendrá oportunidad de hacer una segunda propuesta.

Si pasados 15 días siguen sin alcanzar mayoría, el ejecutivo designará magistrado “con carácter provisional” y presentará otro nombre en el siguiente periodo ordinario de sesiones, y así sucesivamente, ¿por los seis años?

Américo no está en posibilidad de proponer. La iniciativa debe partir del panista de común acuerdo con el sucesor.

Históricamente el Supremo Tribunal ha sido problemático. Recordar que, al arranque del gobierno de Tomás Yarrington, la mayoría de los integrantes del colegiado se rebelaron, querían terminar los seis años para los que fueron nombrados, aun cuando el nuevo sol no los quería ver si en pintura.

Por ello acordó pensionarlos anticipadamente. Todavía cobran su “piscachita” de alrededor de 150 mil pesillos mensuales, como si trabajaran.

La Constitución dice que son inamovibles, pero son causas de retiro forzoso: El juicio político para mandarlos a la cárcel; haber cumplido 75 años, “jubilarse en los términos legales”, padecer incapacidad física o mental y renunciar por parentesco (con otros miembros del Tribunal).

Don Horacio no tendrá problemas para comprar su despensita quincenal. Aparte de los millonarios “ahorritos” de retiro, por dos años recibirá sueldo completo como magistrado a cuenta del “agradecimiento” del Estado por sus servicios. Después podrá litigar o ser patrón.

¿Quién para nuevo magistrado? Pendientes del tema. Marcará el camino de la transición entre los celestes que se van y los guindas que llegan con la encomienda popular de restituir el orden constitucional en Tamaulipas.

Son tiempos de “feria del hueso” en que usted y yo podemos hacer predicciones sobre el equipo que acompañará a Villarreal el siguiente sexenio.

Como decía AVA en campaña, el primer nombramiento ya lo tiene en la bolsa su esposa María Santiago. Será la presidenta del DIF.

Del resto, varias menciones ocupan gente como Olga Sosa Ruiz, JR Gómez Leal, Vicente Joel Hernández,  Carlos Canturosas, Jesús Lavín Verástegui, Maki Ortiz, y otros y otras (el equipo será mitad y mitad, por género).

Se les han olvidado dos nombres de americanistas ligados al proyecto desde hace años. Ellos son Fernando Arizpe García, experto en temas agropecuarios, y Early Beau Buenfil, que lo es en asuntos educativos. No hay que perderlos de vista.

Y la bancada de Morena en el Congreso promoverá acción penal y juico político en contra de siete diputados panistas “por atacar a las instituciones públicas y usurpación de atribuciones”, al reformar un decreto a la brava para contratar crédito por 1,200 millones de pesos.

Encabeza la lista “el fiel y servil cómplice” Félix García Aguiar, y le siguen

Imelda Sanmiguel Sánchez, Carlos Fernández Altamirano, Luis “Cachorro” Cantú, Raúl Rodrigo Pérez, Mirna Edith Flores Cantú y Leticia Sánchez.